Temblor esencial

Introducción

Básicamente, cada persona tiene un cierto temblor, que se manifiesta en forma de leve temblor. Sin embargo, lo normal, fisiológico temblor generalmente no se nota porque es demasiado débil. Sin embargo, existen varias enfermedades, como el Parkinson, que pueden provocar un aumento temblor.

Entre estos tipos de temblores, destaca el temblor esencial, que se distingue de los demás por el hecho de que no suele ir acompañado de otras enfermedades o síntomas. El temblor esencial también es la forma más común de temblor conocida. En aproximadamente el 60% de los casos, se asume una causa genética. Debido al modo de herencia dominante, en el que incluso un gen conduce a la aparición de la enfermedad, una gran parte de la familia suele verse afectada por el temblor esencial.

Causas

Nuevos estudios muestran que aproximadamente el 60% de los casos de temblor esencial se deben a causas genéticas asociadas con cambios en cromosomas 2, 3 y 6. La herencia es autosómica dominante. Esto significa que solo debe estar presente un gen defectuoso para que se desarrolle la enfermedad.

Sin embargo, la enfermedad también puede ocurrir espontáneamente sin que se encuentre ningún cambio en el material genético. Se supone que las disfunciones neuronales, como la falta de inhibición de ciertas los nervios o trastornos en áreas del cerebelo, dan lugar a los síntomas típicos de temblor. Estas disfunciones generalmente solo se desarrollan en el curso del desarrollo, lo cual es evidente por el hecho de que los niños solo se ven afectados muy raramente y la enfermedad no se desarrolla hasta que alcanzan la edad de 20 años.

El curso suele ser progresivo, por lo que el temblor se vuelve más fuerte con el tiempo. No es posible decir que un temblor esencial se hereda con el tiempo. Sin embargo, los estudios han demostrado que el temblor esencial ocurre en la familia de muchos pacientes.

Se supone que en aproximadamente el 60% de todas las personas que sufren de temblor esencial, la enfermedad es hereditaria. Sin embargo, los mecanismos exactos aún no se comprenden completamente. Presumiblemente, hay ciertas secciones de ADN que se transmiten del padre afectado al niño.