Pensamientos suicidas - ¿Qué hacer como familiar?

Introducción

Los pensamientos suicidas ocurren con muchas personas y no siempre tienen que ser inmediatamente peligrosos, pero uno debe permanecer alerta. Personas con enfermedades mentales como depresión. or esquizofrenia se ven particularmente afectados. Estos pensamientos no solo son muy estresantes para la persona afectada, sino también para los familiares que tienen que lidiar con ellos.

Como esto no es algo que experimente todos los días, tratar el tema a menudo es muy difícil y rápidamente puede volverse abrumador. Por tanto, es importante buscar apoyo profesional en una etapa temprana. Pero, ¿cómo procedes exactamente en tal situación?

¿Qué debo hacer si un familiar expresa pensamientos suicidas?

En primer lugar, uno debe saber que abordar los pensamientos o planes suicidas no dañará a los afectados y no los alentará a quitarse la vida. Al contrario, no hay que tener miedo de hablar abiertamente sobre este tema. Para la persona afectada, suele ser un alivio encontrar finalmente una persona de contacto.

Durante la conversación, se debe intentar averiguar si existe un peligro grave. Hay dos preguntas centrales que pueden hacerse: Con estas dos preguntas es más fácil evaluar cuán aguda y peligrosa es la situación. Si la persona en cuestión ya ha hecho planes o incluso ha hecho preparativos, debe ir a una clínica psiquiátrica con tratamiento hospitalario lo antes posible, ¡el tratamiento ambulatorio ya no es útil aquí!

Lo ideal es que el afectado esté de acuerdo y tú mismo puedas acompañarlo a la clínica psiquiátrica, bajo ninguna circunstancia debes dejarlo solo. Sin embargo, si la situación es demasiado peligrosa, especialmente porque existe un peligro para uno mismo o para los demás, es recomendable alertar al servicio de rescate, que luego llamará a la policía si es necesario. Sin embargo, no todos los afectados están en grave peligro de extinción, muchos solo tienen pensamientos suicidas vagos al principio.

En tal caso es especialmente importante escuchar muy bien, tener mucha paciencia y no condenar o no tomar en serio a la persona afectada. Uno debe tratar de ser comprensivo y no acumular presión moral. Es mejor tomarse su tiempo y tener una conversación tranquila en un lugar privado y protegido donde la persona en cuestión se sienta cómoda.

Tal situación requiere mucho coraje por parte del oyente y puede ser abrumadora. Como familiar, no tiene que buscar el motivo de estos pensamientos o la solución al problema. enfermedad mental. El apoyo que brinda la escucha ya juega un papel importante.

El siguiente paso es la búsqueda de ayuda. Si intenta asumir la responsabilidad por su cuenta, puede suceder que entre en una crisis mental debido al estrés. - ¿Hay o ya ha habido planes de suicidio concretos? - ¿Hay o ya ha habido intentos de suicidio?