Melioidosis: descripción, síntomas, tratamiento.

Breve descripción

  • ¿Qué es la melioidosis? La melioidosis es una enfermedad bacteriana que se presenta principalmente en regiones tropicales y subtropicales. Los médicos también lo llaman pseudohollín o enfermedad de Whitmore. Para los europeos, es importante como enfermedad tropical y de viaje.
  • Síntomas: Dependiendo del curso de la enfermedad, el cuadro clínico varía desde la ausencia total de síntomas hasta una intoxicación sanguínea potencialmente mortal. Los primeros signos suelen ser fiebre, infecciones de la piel con formación de bultos y/o problemas pulmonares.
  • Causas: Infección por la bacteria Burkholderia pseudomallei.
  • Diagnóstico: detección del patógeno (a partir de heridas en la piel, mucosas, sangre u orina), detección de anticuerpos en la sangre, tomografía computarizada o resonancia magnética para detectar abscesos en órganos internos.
  • Tratamiento: antibióticos durante varias semanas o meses, extirpación quirúrgica de abscesos.
  • Prevención: Medidas generales de higiene, tratamiento de heridas en la piel, no es posible vacunar.

¿Qué es la melioidosis?

El término pseudohollín se refiere a la similitud con el muermo, una enfermedad de los solípedos causada por la bacteria Burkholderia mallei.

Distribución y frecuencia

La melioidosis sólo ocurre en casos excepcionales en Europa. Son principalmente los viajeros los que se infectan en las regiones tropicales y subtropicales e importan el patógeno. Las principales áreas de distribución son el sudeste asiático (especialmente Tailandia), Singapur y el norte de Australia. La bacteria también se ha detectado ocasionalmente en India, China, Taiwán y América del Norte y del Sur.

Además de los seres humanos, también contraen melioidosis los animales domésticos y salvajes, así como los roedores, por lo que la enfermedad se clasifica como zoonosis. Se trata de enfermedades que se transmiten de animales a humanos (y viceversa).

¿Cuáles son los síntomas de la melioidosis?

Los síntomas que ocurren varían de persona a persona. La gama de síntomas se extiende desde una intoxicación sanguínea completamente asintomática hasta una intoxicación potencialmente mortal.

Síntomas de melioidosis aguda.

Piel: Si el patógeno penetra la piel a través de pequeñas heridas, en unos pocos días se produce una infección cutánea purulenta localizada en esta zona y también se forma un pequeño bulto en la piel. Los ganglios linfáticos cercanos al sitio de la infección aumentan de tamaño. Los afectados tienen fiebre y se sienten mal. En algunos pacientes, la infección de la piel se convierte en una "forma generalizada", que afecta a todo el cuerpo y puede poner en peligro la vida.

Los signos de una infección pulmonar son

  • fiebre
  • Tos productiva con esputo parcialmente sanguinolento.
  • Respiración rápida

Forma generalizada: la melioidosis generalizada es la forma más grave de la enfermedad. Se desarrolla tanto en la piel como en la forma pulmonar. Las bacterias ingresan al torrente sanguíneo y se distribuyen por todo el cuerpo. Los médicos se refieren a esto como envenenamiento de la sangre o sepsis, que a menudo es fatal en pacientes con melioidosis a pesar del tratamiento.

Como reacción de defensa del cuerpo contra las bacterias, se forman abscesos en los pulmones, el hígado y el bazo, en el tracto urogenital, en el tejido adiposo y en las articulaciones.

Síntomas de la melioidosis crónica.

Los posibles síntomas son

  • fiebre
  • sudores nocturnos
  • la pérdida de peso
  • achaques

Causa y factores de riesgo

La causa de la melioidosis es una infección por la bacteria "Burkholderia pseudomallei". Ocurre en zonas de riesgo como suelos húmedos, barro, estanques y arrozales y es extremadamente resistente: el patógeno sobrevive durante meses en lugares húmedos.

Si la bacteria ingresa al cuerpo, puede causar daños graves. Esto es causado por toxinas (exotoxinas) y enzimas (proteasa necrotizante) producidas por la propia bacteria. Estos últimos son desencadenantes de abscesos que potencialmente pueden formarse en todos los órganos.

¿Cómo se produce la infección?

La transmisión de persona a persona es posible, pero sólo se ha descrito en casos aislados. Lo mismo se aplica a los animales infectados: los animales domésticos y salvajes, así como los roedores, son portadores potenciales, aunque raros, cuando están en contacto cercano con los humanos.

Los factores de riesgo

El principal factor de riesgo de la melioidosis es viajar a áreas donde el patógeno está muy extendido, especialmente el sudeste asiático y el norte de Australia.

También corren un riesgo especial las personas que entran en contacto con el patógeno por motivos profesionales. Entre ellos se incluyen veterinarios, personal de mataderos y empleados de laboratorio.

¿Qué hace el médico?

El diagnóstico de la melioidosis suele ser difícil, ya que la enfermedad suele aparecer sólo semanas, meses o incluso años después de una estancia en una zona de riesgo.

Detección de patógenos

Detección de anticuerpos

Para confirmar el diagnóstico se realiza otra prueba: el médico examina si en la sangre se encuentran anticuerpos contra el patógeno. Estos demuestran que ya se ha producido una infección por Burkholderia pseudomallei.

Exámenes adicionales

Para detectar abscesos dentro del cuerpo, el médico suele realizar más exámenes. Para ello son adecuadas la tomografía computarizada (TC) de tórax, abdomen y pelvis y la resonancia magnética (MRI) de la cabeza.

¿Cómo se trata la melioidosis?

Medicamentos

Los antibióticos son los fármacos de elección para el tratamiento de la melioidosis: en las primeras dos a ocho semanas de tratamiento (terapia inicial), el paciente recibe los ingredientes activos ceftazidima o meropenem por vía intravenosa. A continuación, el médico prescribe antibióticos durante otros tres a seis meses, que el paciente toma por vía oral (p. ej., en forma de comprimidos). Los principios activos adecuados son trimetoprim/sulfametoxazol, doxiciclina o amoxicilina/ácido clavulánico. Los médicos se refieren a esta segunda fase del tratamiento como terapia de erradicación.

A pesar del tratamiento, la fiebre en la melioidosis normalmente sólo desaparece después de un promedio de nueve días.

La cirugía

Curso de la enfermedad y pronóstico.

En la mayoría de los casos (90 por ciento), la melioidosis es aguda, en el 10 por ciento de todos los casos tiene un curso crónico.

La melioidosis aguda pone en peligro la vida. Si la bacteria ingresa al torrente sanguíneo, provoca envenenamiento de la sangre (sepsis), que es fatal en un plazo de 24 a 48 horas en hasta el 40 por ciento de los casos si no se trata. Las personas con enfermedades preexistentes, como diabéticos, inmunodeprimidos o enfermos crónicos, corren un riesgo especial. Con un tratamiento adecuado con antibióticos, más del 90 por ciento de los pacientes sobreviven.

Prevención

Las posibilidades de prevenir la melioidosis se limitan a medidas generales de higiene. No hay vacunación.

Dado que el patógeno está muy extendido en el agua y el suelo, los viajeros a zonas de riesgo deben prestar atención a la higiene personal y a la preparación higiénica de los alimentos. También es importante limpiar y desinfectar cuidadosamente las heridas de la piel.