Moretón: definición, tratamiento, tiempo de curación

Breve descripción

  • Tratamiento: El tratamiento depende del tipo y la gravedad de la contusión. Las medidas de primeros auxilios incluyen enfriamiento y elevación. En caso de lesiones graves, puede ser aconsejable un pinchazo.
  • Curso de la enfermedad y pronóstico: el período de curación de los hematomas leves es de unos pocos días a semanas. Para una contusión (hematoma) grave, se necesitan cuatro semanas o más.
  • Síntomas: Dependiendo de la gravedad de la contusión, los posibles síntomas incluyen dolor, hinchazón y restricción de movimiento. Otros síntomas ocurren dependiendo de la localización.
  • Causas y factores de riesgo: Una contusión se produce, por ejemplo, por un golpe, una caída o un impacto. Este tipo de lesiones se producen con frecuencia en determinados deportes como el fútbol o el hockey sobre hielo.
  • Diagnóstico: El diagnóstico se realiza mediante un examen médico. Esto también puede incluir un examen de rayos X, una tomografía computarizada (CT) o una resonancia magnética (MRI).

¿Qué es una contusión?

Un hematoma es una lesión directa provocada por la compresión. Está cerrado, por lo que no hay lesiones visibles en la piel ni huesos rotos. El tejido en el sitio magullado (por ejemplo, piel, tejido adiposo, fascia, músculo, tendones, cápsula tisular, etcétera) está magullado.

Dependiendo del tipo y la ubicación de la contusión, se habla de contusión ósea, contusión muscular, contusión del globo ocular, contusión pulmonar, contusión cerebral, contusión del muslo (“beso de caballo”), contusión de las costillas, contusión de la rodilla o contusión del hombro. También se produce una contusión en otras partes del cuerpo, como el pie o la muñeca.

contusión costal

Obtenga más información sobre la causa, los síntomas y el tratamiento de las costillas magulladas en el artículo Contusión costal.

hematoma en la rodilla

Obtenga más información sobre la causa, los síntomas y el tratamiento de una rodilla magullada en el artículo Contusión en la rodilla.

Contusión de hombro

Contusión y hematoma

El término médico para contusión es contusión (contusio). En la práctica, sin embargo, a menudo se hace una distinción entre ambos términos: una contusión se define como un daño tisular trivial asociado con dolor y sin importancia a largo plazo. No se acompaña de sangrado ni hinchazón.

Una contusión, por otro lado, es un hematoma severo que también se acompaña de hinchazón y hemorragia (hematoma). Si después de una contusión se siente un bulto debajo de la piel que resulta ser una hinchazón, se puede suponer que se trata de una contusión grave. Si también se ha destruido tejido, los médicos lo denominan contusión.

¿Cómo se trata una contusión?

Primeros auxilios para una contusión.

El objetivo de los primeros auxilios en caso de una contusión es reducir al máximo la fuga de sangre y linfa al tejido circundante. Para hacer esto, siga la regla PECH:

  • Hielo: enfríe el área afectada durante aproximadamente 15 a 20 minutos. Para ello, utilice bolsas de hielo o compresas con agua fría. El frío hace que los vasos sanguíneos se contraigan y salga menos sangre. Precaución: debido al riesgo de congelación local, ¡nunca aplique hielo directamente sobre la piel!
  • Compresión: la presión externa puede evitar que el tejido se hinche y que aún más sangre de los vasos lesionados se filtre al tejido circundante. Por lo tanto, aplique un vendaje compresivo en el área lesionada si es posible.
  • Elevar: Si es posible, eleve el área lesionada. Esto también reduce el flujo sanguíneo al área lesionada.

Para los moretones en los ojos, ¡aplique una toallita fría!

En caso de hematomas en el abdomen, se alivia el dolor si la persona afectada se acuesta con las rodillas dobladas.

Remedios a base de hierbas para los moretones.

Algunos pacientes también recurren a remedios caseros para los hematomas, como compresas de cuajada o compresas de arcilla. Sin embargo, a menudo no está científicamente demostrado si un determinado remedio casero realmente ayuda contra un hematoma.

Los remedios caseros tienen sus límites. Si los síntomas persisten durante un período de tiempo más largo, no mejoran o incluso empeoran, siempre se debe consultar a un médico.

¿Cuándo ver a un médico?

A veces no es fácil distinguir entre una lesión grave y una lesión menor.

Un simple hematoma generalmente no requiere una visita al médico. Si las molestias son intensas o persistentes (por ejemplo, si el hematoma o la hinchazón no bajan), es necesario acudir al médico. Lo mismo se aplica si, en el caso de un hematoma que inicialmente parece trivial, los síntomas empeoran rápidamente.

En caso de duda, consulte siempre a un médico. Especialmente si se ven afectados la cabeza, el abdomen o los ojos. Por ejemplo, en el caso de una contusión del globo ocular, puede ser necesario administrar medicamentos para reducir la presión intraocular elevada. Si la contusión ha provocado un desprendimiento de retina, el médico operará.

En el caso de contusiones muy graves con grandes hematomas, especialmente en la articulación, puede ser útil una punción. En este procedimiento, el médico utiliza una aguja para aspirar el líquido que se ha acumulado en el tejido. A veces, el médico también extirpa quirúrgicamente un hematoma existente.

Como complicación de una contusión muscular grave, puede producirse un aumento de la presión en el músculo, el llamado síndrome compartimental. Esto significa que el músculo ya no recibe sangre (y por tanto oxígeno) y puede morir. Por lo tanto, el alivio quirúrgico debe proporcionarse rápidamente.

En el caso de una contusión cerebral, el médico suele derivar al paciente a un hospital.

Una contusión generalmente se cura sola y sin consecuencias. Lo mismo se aplica normalmente a una contusión grave. En este último caso, sólo excepcionalmente se desarrollan cambios cicatriciales en la zona de la hemorragia.

Contusión: Duración

El período de curación de una contusión trivial suele ser de dos a tres semanas, en casos leves de sólo unos días. En el caso de una contusión acompañada de cambios cicatriciales, la curación puede tardar cuatro semanas o más.

Contusión: síntomas

Una contusión es dolorosa, especialmente cuando el área lesionada se mueve o se tensa. Sin embargo, no hay sangrado ni hinchazón significativa. Estos síntomas no aparecen hasta que se produce una contusión (hematoma) grave.

A menudo, una contusión va acompañada de una limitación del movimiento, por ejemplo en el caso de una contusión muscular en la zona del muslo (contusión del muslo).

En caso de una contusión cerebral (contusio cerebri), se produce pérdida del conocimiento y síntomas neurológicos (como ataques epilépticos, pérdida del olfato = anosmia, del habla, alteraciones visuales, etc.).

Causas y factores de riesgo

Una contusión es causada por una fuerza contundente directa desde el exterior. Por ejemplo, se trata de un golpe, caída, impacto, caída de objetos o atrapamiento.

Los hematomas se producen con mucha frecuencia durante la práctica de deportes, especialmente los deportes de contacto como el fútbol o el hockey sobre hielo. Pero también es posible sufrir una lesión de este tipo en deportes en los que no se tiene contacto directo con los compañeros de equipo. Esto sucede, por ejemplo, cuando una pelota de tenis entra en el ojo (contusión del globo ocular).

Examen y diagnóstico.

El médico primero preguntará sobre los síntomas y su origen. Posibles preguntas son:

  • ¿Cómo ocurrió la lesión? Por ejemplo, ¿te caíste o recibiste un golpe?
  • ¿Tiene alguna otra queja?

Luego sigue el examen físico. El médico examina la zona lesionada y la palpa con atención. Al hacerlo, busca, por ejemplo, hinchazón, presión dolorosa y restricción de movimiento.

Si la contusión afecta a una articulación, se puede formar un derrame, es decir, se secreta más líquido en la cavidad articular. Si se han destruido los vasos sanguíneos, la sangre se acumula en la cavidad articular (hematoma).

Mediante una ecografía, el médico detecta el alcance de la lesión. A veces realiza exámenes de rayos X para descartar lesiones óseas adicionales.

Procedimientos de imagen

Una contusión ósea se produce especialmente en partes del cuerpo donde el hueso sólo está cubierto por una fina capa de piel. Este es el caso, por ejemplo, de la cabeza, las costillas y la espinilla.

Para un diagnóstico más preciso (como para descartar lesiones de ligamentos o en el caso de una contusión cerebral), el médico solicitará una tomografía computarizada (TC) o una resonancia magnética (MRI).

Prevención

La ropa protectora especial puede reducir el riesgo de sufrir una contusión y otras lesiones (deportivas) más graves. Por ejemplo, se recomienda usar casco al andar en bicicleta, esquiar y patinar en línea, y espinilleras al jugar hockey sobre césped o fútbol. Se recomiendan protectores de espalda para practicantes de snowboard y ciclistas de montaña.