Causas Vejiga artificial

Causas

Varias enfermedades pueden hacer necesario reemplazar el vejiga con uno artificial. Esto se vuelve necesario siempre que el propio cuerpo vejiga ya no puede realizar la tarea de recolectar la orina correctamente o cuando tiene que ser extraída durante el curso de una enfermedad. Por ejemplo, células cancerosas de las vejiga puede requerir la extracción de la vejiga.

Para prevenir el crecimiento y desarrollo de metástasis, la vejiga se extrae cuando se detectan algunos tumores. Sin embargo, no todos los tumores de vejiga requieren una extirpación de la vejiga y, por lo tanto, la creación de una vejiga artificial. Las vejigas artificiales también se utilizan para enfermedades congénitas.

Por ejemplo, en personas que padecen la enfermedad de la denominada "espalda abierta" (término médico: espina bífida, meningomielocele), a menudo es necesario extraer la vejiga y reemplazarla con un vejiga artificial. Un bloqueo del uretra, que ocurre de manera congénita o en el curso de la vida, puede significar que un vejiga artificial tiene que ser insertado para reemplazar el propio cuerpo. La vejiga puede resultar tan gravemente dañada por la radioterapia que se debe insertar una vejiga artificial como resultado de la terapia. Esto es particularmente común con enfermedades tumorales de la vejiga con radioterapia.

Desde el intestino

Una vejiga artificial generalmente se forma a partir de diferentes secciones del intestino. Se utilizan diferentes partes del intestino, según el tipo de derivación urinaria elegida. Usando diferentes técnicas de corte, se puede formar un depósito más o menos redondo a partir de la sección intestinal alargada utilizada para la vejiga artificial, que luego funciona como un sustituto de la vejiga.

La porción faltante de intestino puede ser reemplazada por las secciones intestinales restantes en su función, por lo que los pacientes tratados experimentan pocos efectos secundarios de la función intestinal. Dado que el intestino normalmente no asume la función de un reservorio de orina, el uso de secciones intestinales para la vejiga artificial, no obstante, da lugar a complicaciones. Por ejemplo, pueden ocurrir cambios malignos en el intestino utilizado. La vejiga también debe vaciarse con mayor frecuencia, ya que el intestino es mucho menos flexible que la vejiga. Sin embargo, en conclusión, el intestino sigue siendo el material de elección para la desviación de orina artificial.