Pronóstico Agua en los pulmones

Pronóstico

Si el tratamiento se inicia de forma rápida y eficaz en el caso de agua en los pulmones, el pronóstico es muy bueno. En casos raros, neumonía puede desarrollarse sobre la base de edema pulmonar. Es importante señalar que el pronóstico siempre depende del tipo y extensión de la enfermedad subyacente.

Agua en los pulmones o en el pulmón brecha obstaculiza respiración e intercambio de oxígeno. Dependiendo de la extensión y cantidad del agua, puede ocurrir una falta de aire severa y una deficiencia de oxígeno. Si el agua en los pulmones se desarrolla lentamente y los síntomas aumentan gradualmente, los pulmones pueden tolerar grandes cantidades de agua y adaptarse.

En este caso, una terapia lenta es suficiente para drenar el agua. Sin embargo, si grandes cantidades de agua entran rápidamente en los pulmones o pulmón fisura, los pulmones no tienen suficiente reserva y mecanismos compensatorios, lo que conduce a graves respiración dificultades. Esto puede tener que tratarse en una unidad de cuidados intensivos y puede requerir tratamiento invasivo. ventilación.

Esperanza de vida

If neumonía es la causa del agua en los pulmones, definitivamente debe detectarse con los síntomas típicos y tratarse temprano, ya que es una enfermedad grave. Después de todo, sigue siendo la enfermedad infecciosa que con mayor frecuencia conduce a la muerte en los países industrializados. Especialmente los pacientes ancianos, lactantes, niños pequeños y personas inmunodeprimidas tienen un mayor riesgo debido a enfermedades previas, por lo que los pacientes mayores de 65 años, con una inestabilidad sistema cardiovascular o la conciencia nublada deben tratarse como pacientes hospitalizados en una clínica en cualquier caso.

Aquí, además de la terapia farmacológica con un antibiótico, el general condición se puede monitorear y se pueden tomar las medidas adecuadas rápidamente si la condición se deteriora. Si los síntomas de neumonía son más leves, el tratamiento también se puede realizar de forma ambulatoria, realizándose un control a más tardar 2-3 días después. Si la retención de agua en los pulmones se produce como parte de otra enfermedad subyacente, como corazón fracaso o riñón debilidad, el curso de la enfermedad depende esencialmente de qué tan grave haya progresado la enfermedad y cómo se trate.

A menudo no existe cura, pero los síntomas a menudo pueden aliviarse en la medida en que el paciente pueda llevar una vida casi sin restricciones. Esto presupone que, además de la farmacoterapia, el propio paciente preste atención a su estilo de vida.