Aftas (Candidiasis): Definición, Diagnóstico, Terapia

Breve descripción

  • Diagnóstico:Preparación de un cultivo de hongos, detección microscópica.
  • Tratamiento: Agentes antifúngicos (antimicóticos) para aplicación o ingestión.
  • Síntomas: En la piel exterior, pápulas escamosas rojizas y picazón; en mucosas, picazón, recubrimientos blanquecinos que se pueden desprender
  • Prevención: Depende de la localización.
  • Causas y factores de riesgo: zonas de la piel húmedas y mal ventiladas, defensas inmunitarias bajas, enfermedades como diabetes mellitus, infección por VIH, embarazo, uso prolongado de antibióticos o cortisona.
  • Pronóstico y progresión: Generalmente la candidiasis desaparece con el tratamiento adecuado. En raras ocasiones, concretamente en el caso de un sistema inmunitario gravemente debilitado, también son posibles complicaciones.

¿Qué es el tordo?

La candidiasis es una infección causada por ciertos hongos de levadura. El patógeno más común de la candidiasis es Candida albicans. Por eso los médicos también llaman candidiasis a la candidiasis. La candidiasis suele aparecer en la piel exterior o en las membranas mucosas.

En particular, la candidiasis se produce en los pliegues de la piel, en la zona del pañal de los bebés (aftas del pañal) o en las mucosas de la boca, el esófago, el tracto gastrointestinal y en la zona genital de mujeres y hombres.

La infestación de otros órganos (p. ej., cerebro, ojos, huesos), así como de la sangre, con hongos levaduriformes es posible, pero poco frecuente. Luego los médicos hablan de candidiasis sistémica.

¿Cómo se reconoce la candidiasis?

Si aparece aftas en la piel exterior, en la boca o en el área genital, los médicos suelen sospechar candidiasis basándose en la apariencia y los síntomas típicos. La piel enrojecida con pequeñas pústulas en la zona del pañal también es un indicio típico de aftas en bebés para el pediatra.

Para confirmar el diagnóstico, el médico suele tomar un hisopo del área modificada y examinarlo con un microscopio.

Si se sospecha una infección interna por Candida albicans, el laboratorio utiliza el hisopo para preparar un cultivo de hongos. Esto permite identificar con precisión las levaduras y comprobar su sensibilidad a los medicamentos.

¿Cómo se puede tratar la candidiasis?

El tratamiento de la candidiasis depende de la ubicación y el alcance de la infestación. Para las infecciones internas por hongos, los médicos suelen utilizar medicamentos orales. Entre ellos se incluyen antimicóticos como la anfotericina B, principios activos del grupo de los llamados triazoles (por ejemplo, fluconazol o itraconazol) y nistatina.

En el caso de la candidiasis superficial de la piel y las mucosas, para el tratamiento de las aftas suele ser suficiente aplicar agentes antifúngicos, por ejemplo en forma de crema. A veces, los medicamentos para el tratamiento externo de las infecciones por hongos también contienen un agente antipicazón (p. ej., cortisona).

Candidiasis: síntomas y localizaciones típicas.

  • Boca y garganta (candidiasis oral)
  • Piel y pliegues cutáneos, en los bebés a menudo en la zona del pañal (aftas del pañal), en madres lactantes, especialmente en el pecho (aftas del pañal)
  • Esófago (esofagitis por aftas)
  • tracto gastrointestinal
  • órganos genitales externos (micosis vaginal, inflamación de bellota/micosis del pene)
  • uñas de manos y pies
  • órganos internos, incluida la sangre

Dependiendo de su manifestación, el aftas causa síntomas como enrojecimiento de la piel, pústulas, escamas, capa blanquecina en las mucosas y sensación de ardor, dolor o picazón.

En la mayoría de las personas sanas, Candida albicans se puede detectar en la flora oral o intestinal. El hongo no causa ningún síntoma. El propio sistema de defensa del cuerpo garantiza que el número de gérmenes sea bajo, por lo que el hongo es un “colonizador” sin consecuencias para la salud.

Sin embargo, si el sistema inmunológico está deprimido (especialmente por medicamentos o enfermedades), los hongos se multiplican casi sin control: así es como se produce la candidiasis. Además, si la piel y las mucosas están doloridas y lesionadas, el valor del pH cambia o ciertos valores metabólicos se alteran (por ejemplo, en la diabetes mellitus), esto favorece el desarrollo de aftas.

La profilaxis contra la candidiasis es especialmente importante para los bebés y las personas muy ancianas y enfermas, ya que son especialmente susceptibles a las infecciones por hongos.

¿Existe una profilaxis contra la candidiasis?

Para reducir el riesgo de infección de la piel y las mucosas por Candida albicans, es útil lo siguiente:

  • Pliegues secos de la piel (por ejemplo, área de la ingle, debajo del pecho, entre los dedos de los pies, área del pañal) con mucho cuidado después del lavado, cambio frecuente de pañales a bebés y niños pequeños
  • Use ropa aireada y transpirable.
  • Reducir peso si tiene sobrepeso
  • Recibir tratamiento para enfermedades como la diabetes mellitus.
  • Utilice ropa interior transpirable, por ejemplo de algodón.
  • No utilice sustancias de lavado secantes con un valor de pH alto para la zona íntima.

Especialmente en las infecciones genitales por Candida, la candidiasis es contagiosa. Tiene sentido tratar a ambos socios para prevenir la reinfección mutua.

En muchos casos, una infección por Candida albicans se asocia con un sistema inmunológico debilitado. Un estilo de vida saludable con una dieta variada, suficiente ejercicio físico y poco estrés favorece el funcionamiento del sistema inmunológico.

¿Cuáles son las causas de la candidiasis?

La causa de la candidiasis son los hongos de levadura del género Candida. Por eso, los médicos llaman a la infección por estos hongos candidiasis. Se conocen en total unas 150 especies de Candida. El patógeno más importante es Candida albicans.

Los siguientes factores de riesgo están asociados con la candidiasis:

  • Factores que reducen los mecanismos protectores naturales de la piel (por ejemplo, pH desfavorable, ambiente cálido y húmedo)
  • Enfermedades como la diabetes mellitus.
  • La infección por VIH
  • Cambios hormonales, por ejemplo durante el embarazo.
  • Medicamentos, por ejemplo, uso prolongado de antibióticos o glucocorticoides (la llamada cortisona)
  • Uso prolongado de catéteres.

¿Cuál es el curso de la candidiasis?

El curso de la candidiasis depende de la ubicación y el alcance de la infección por hongos. La candidiasis superficial de la piel o las mucosas, así como las infecciones genitales (por ejemplo, aftas vaginales), suelen curarse completamente con terapia.

En el caso de infestación interna de órganos o infección de la sangre por levaduras Candida (la llamada candidemia), el curso a veces es más complicado y, en casos graves, pone en peligro la vida. En tales casos, sin embargo, a menudo existen enfermedades subyacentes debilitantes que favorecen la infección por Candida.