Estenosis del canal espinal: tipos, terapia, desencadenantes

Breve descripción

  • Tratamiento: Mayoritariamente conservador, combinación de fisioterapia, entrenamiento de espalda, terapia de calor, electroterapia, corsé de soporte (órtesis), tratamiento y terapia del dolor; raramente cirugía
  • Causas y factores de riesgo: a menudo desgaste (degeneración), rara vez congénito, riesgo de cirugía de columna, discos abultados o herniados, cambios hormonales, enfermedades óseas como la enfermedad de Paget.
  • Síntomas: A menudo asintomático al principio; más tarde dolor de espalda con radiación en las piernas, movimiento restringido; alteraciones sensoriales en las piernas, cojera, trastornos de la vejiga y del recto, alteración de la función sexual; muy raramente parálisis
  • Diagnóstico: basado en los síntomas, procedimientos de imagen (resonancia magnética, tomografía computarizada)
  • Progresión y pronóstico: por lo general, progresión muy lenta sin tratamiento; se puede tratar bien con terapia conservadora
  • Prevención: No es específicamente posible; Comportamiento respetuoso con la espalda, por ejemplo al transportar cargas pesadas.

¿Qué es la estenosis del canal espinal?

La estenosis del canal espinal es un estrechamiento del canal espinal a través del cual pasa la médula espinal con nervios y vasos sanguíneos.

A menudo afecta a personas mayores debido al desgaste de las partes móviles de la columna. Sin embargo, también existen formas congénitas. Sin embargo, estos son raros.

¿Qué formas de estenosis del canal espinal existen?

La forma más común de estenosis del canal espinal es la de la columna lumbar: estenosis del canal espinal lumbar.

Otras formas son la estenosis del canal espinal cervical, que afecta la columna cervical (HWS) y, en raras ocasiones, la estenosis del canal espinal torácico, que afecta la columna torácica (BWS).

La estenosis del canal espinal sólo se define como un cuadro clínico independiente desde 1996. La Organización Mundial de la Salud (OMS) le asigna varios códigos de diagnóstico en función de su gravedad: los códigos M48 (Otras espondilopatías), M99 (Disfunciones biomecánicas, no clasificadas en otra parte) y G55 (Compresión de raíces y plexos nerviosos en enfermedades clasificadas en otra parte).

Clasificación de la estenosis del canal espinal

Como criterio para determinar la gravedad de la estenosis del canal espinal, el médico utiliza técnicas de imagen como la resonancia magnética para medir cuánto se estrecha el canal espinal. Los médicos diferencian entre

  • Estenosis relativa del canal espinal con un diámetro del canal inferior a doce milímetros
  • Estenosis absoluta del canal espinal con un diámetro del canal inferior a diez milímetros

Tratamiento

En la mayoría de los casos, la estenosis espinal se puede tratar bien con métodos de terapia conservadora. Sólo en raras ocasiones (en casos muy graves) es necesaria una intervención quirúrgica.

Tratamiento conservador

Las formas conservadoras de tratamiento para la estenosis espinal incluyen

  • Fisioterapia (ejercicios terapéuticos, baños, tratamientos de relajación muscular y otros) para aliviar y estabilizar la columna.
  • Terapia de calor para relajar los músculos de la espalda.
  • Electroterapia para el tratamiento del dolor y la relajación muscular.
  • Corsés de soporte (órtesis) para aliviar la presión sobre la columna.
  • Entrenamiento de espalda (entrenamiento de fortalecimiento específico para la espalda y los músculos abdominales, consejos para posturas favorables para la espalda, consejos de comportamiento)
  • Formación en manejo psicológico del dolor.
  • Terapia del dolor

En la mayoría de los casos, se combinan varias de las medidas anteriores. Esto se conoce como concepto de terapia modular.

Medicamentos

El tratamiento eficaz del dolor es la piedra angular del tratamiento conservador de la estenosis. Los médicos utilizan diferentes sustancias activas según la intensidad del dolor.

Algunos analgésicos irritan el revestimiento del estómago si se toman durante un período prolongado. Por eso los médicos suelen recetar como acompañamiento los llamados inhibidores de la bomba de protones. Como “protección del estómago”, estos medicamentos garantizan que el cuerpo produzca menos ácido estomacal.

Además de los analgésicos clásicos, los médicos también pueden recetar antidepresivos suaves. En pequeñas dosis, ayudan con el dolor crónico, ya que actúan a nivel de neurotransmisores.

A veces, los relajantes musculares pueden ayudar con la estenosis del canal espinal. Si el dolor es muy intenso, la terapia con altas dosis de cortisona puede ser una opción: la cortisona reduce la hinchazón del tejido blando que presiona el canal espinal. Esto deja un poco más de espacio en el canal.

Los distintos principios activos con efectos analgésicos, antiinflamatorios, anestésicos locales y/o descongestionantes pueden administrarse a menudo por vía oral (en forma de comprimidos, cápsulas o similares). A menudo se pueden inyectar directamente en el área afectada de la estenosis del canal espinal.

En los estudios sobre la terapia con inyecciones, a los pacientes se les administraron sustancias ineficaces (placebo), a menudo simple sal de mesa, en lugar de medicamentos reales. A pesar de este tratamiento simulado, muchos pacientes experimentaron posteriormente menos dolor. Los investigadores descubrieron que las inyecciones de placebo liberaban los propios "analgésicos" del cuerpo (endorfinas).

¿Cómo funciona una operación?

Casi todos los pacientes con estenosis del canal espinal reciben ayuda con una terapia conservadora. La cirugía rara vez es necesaria, normalmente cuando fallan nervios importantes. Los médicos también operan si el tratamiento conservador fracasa o si el paciente sufre mucho y tiene una vida cotidiana muy restringida.

El objetivo de la cirugía es siempre aliviar la región donde se aprieta la médula espinal. Para ello existen varios métodos:

  • El método de elección es el alivio de la presión (descompresión) de los nervios constreñidos. Para ello, se extirpa el arco vertebral en el lugar de la estenosis en uno o ambos lados junto con la apófisis espinosa (hemi-/laminectomía). A veces sólo se extirpan partes del arco vertebral (microdescompresión).
  • Fusión (espondilodesis): las vértebras individuales se unen y se endurecen utilizando material de la cresta ilíaca o tornillos. Esto evita que se deslicen entre sí y estrechen el canal espinal.

El médico decide qué método es el más adecuado en cada caso individual. Los tres procedimientos son generalmente mínimamente invasivos o microquirúrgicos. Esto significa que el médico no necesita hacer una gran incisión para llegar a la región afectada. Son suficientes varias pequeñas incisiones, a través de las cuales el cirujano introduce una pequeña cámara con una fuente de luz y finos instrumentos quirúrgicos.

Existen ciertos riesgos asociados con cada operación. Por ejemplo, es posible que se dañen los nervios durante el procedimiento. Además, en algunos casos, la “piel” que rodea la médula espinal se daña, lo que provoca una fuga de líquido cefalorraquídeo (fístula de líquido cefalorraquídeo). Por lo tanto, antes de operar una estenosis del canal espinal, el médico sopesará cuidadosamente los beneficios esperados frente a los riesgos potenciales.

Después de la cirugía del canal espinal

Los cuidados posteriores a la cirugía del canal espinal dependen del tipo y la gravedad de la operación. Después de procedimientos mínimamente invasivos, normalmente es posible abandonar el hospital al poco tiempo, en algunos casos el mismo día de la operación.

Después de la operación, los médicos recomiendan un período de reposo físico, normalmente de unas seis semanas. Se pueden retomar antes varias actividades más ligeras.

Las actividades sedentarias, como conducir, suelen volver a ser posibles antes que el trabajo físico intenso. Por lo tanto, la duración de la baja por enfermedad o de la incapacidad laboral depende de la gravedad de la estenosis del canal espinal y del tipo de cirugía, así como del tipo de actividad. Por regla general, las actividades sedentarias son posibles de nuevo después de unas cuatro semanas, y el trabajo físico intenso sólo después de unos tres meses.

Metodos alternativos

Varios profesionales sanitarios ofrecen los llamados métodos de tratamiento alternativos, especialmente para el dolor causado por la estenosis del canal espinal. Estos incluyen, por ejemplo

  • acupuntura
  • Terapia con axomera
  • homeopatía

Aunque muchos pacientes informan que han experimentado alivio a través de métodos de curación alternativos, los efectos aún no han sido probados en la medicina basada en evidencia según criterios científicos y médicos convencionales.

Causas

La causa más común de estenosis espinal es el desgaste (degeneración) de la columna: con el tiempo, los discos intervertebrales entre las vértebras pierden líquido. Como resultado, se vuelven más planos y tienen menos capacidad para absorber la presión relacionada con el movimiento; por lo tanto, los cuerpos vertebrales están sometidos a una mayor tensión y luego presionan el canal espinal.

Los músculos de la espalda bien entrenados estabilizan la columna para que no tenga síntomas a pesar de la estenosis del canal espinal. Por el contrario, los pacientes con músculos de la espalda poco desarrollados suelen desarrollar síntomas típicos de estenosis. Esto se debe a que si los músculos no pueden sostener la columna inestable, el cuerpo forma nuevas estructuras óseas en las vértebras para estabilizar la columna. Estas estructuras óseas recién formadas se denominan osteofitos. A menudo no sólo agravan la estenosis espinal, sino que también la provocan.

La osteoartritis de las articulaciones vertebrales (articulaciones facetarias) también puede provocar nuevas formaciones óseas y, por tanto, favorecer la estenosis espinal (síndrome facetario).

Las causas más raras de estenosis del canal espinal son

  • Malformaciones congénitas como espalda muy hundida, espondilolistesis, condrodistrofia (trastornos en la conversión del cartílago en tejido óseo durante la edad embrionaria). En tales casos, los síntomas ya aparecen entre los 30 y 40 años.
  • Cirugía de columna (la formación excesiva de tejido cicatricial puede estrechar el canal espinal)
  • Lesiones de los cuerpos vertebrales.
  • Protrusiones o prolapso del material del disco intervertebral hacia el canal espinal.
  • Cambios hormonales que afectan la sustancia ósea y la estabilidad de los cuerpos vertebrales (p. ej., enfermedad de Cushing)
  • Estrechez del canal espinal desde el nacimiento por causa desconocida (estenosis idiopática del canal espinal)

Síntomas

La estenosis del canal espinal generalmente ocurre en las vértebras lumbares (estenosis del canal espinal lumbar). No necesariamente produce síntomas. Estos sólo ocurren cuando el canal espinal se estrecha hasta tal punto que se comprimen los nervios o los vasos sanguíneos. Los síntomas específicos, cuándo y en qué medida aparecen, dependen de varios factores. Estos incluyen la gravedad de la enfermedad, la postura del paciente y el grado de esfuerzo físico.

Al inicio de la enfermedad los síntomas no son muy característicos y son variados. Estas quejas no específicas incluyen

  • Dolor de espalda en la región lumbar (lumbago), que suele irradiarse a un lado de las piernas (lumboisquialgia)
  • Movilidad reducida en la zona de las vértebras lumbares.
  • Tensión muscular en la región lumbar.

Si la estenosis continúa progresando, son posibles las siguientes quejas:

  • Alteraciones sensoriales en las piernas.
  • Sensaciones de malestar en las piernas, como ardor, hormigueo, sensación de frío, sensación de algodón absorbente debajo de los pies.
  • Sensación de debilidad en los músculos de las piernas.
  • Cojera relacionada con el dolor (claudicación espinal)
  • Trastornos de la vejiga y/o del recto (problemas con las deposiciones y la micción o incontinencia)
  • Función sexual deteriorada

La cojera debida a estenosis del canal espinal (claudicación espinal) debe distinguirse de la cojera temporal debida a trastornos circulatorios en la “claudicación intermitente” (PAD). Esto último se llama claudicación intermitente.

En muy raras ocasiones, la estenosis del canal espinal conduce al llamado síndrome parapléjico: ambas piernas están paralizadas y hay problemas para defecar y orinar.

A veces, el estrechamiento del canal espinal no afecta a las vértebras lumbares sino a las cervicales (estenosis del canal espinal cervical). Los afectados suelen tener dolor de cuello que se irradia a los brazos. Con el tiempo, también pueden desarrollar alteraciones sensoriales en las piernas, así como problemas rectales y de vejiga.

Exámenes y diagnóstico

Durante la consulta inicial (anamnesis), el médico pregunta detalladamente al paciente sobre sus síntomas y afecciones conocidas, preexistentes o subyacentes (hernia discal, artrosis, osteoporosis y similares). A esto le sigue un examen físico: entre otras cosas, el médico suele pedir al paciente que incline la parte superior del cuerpo hacia atrás y luego hacia adelante. Si hay estenosis del canal espinal, la espalda duele al inclinarse hacia atrás, mientras que los síntomas desaparecen al doblar el tronco.

Alternativamente, se pueden obtener imágenes de la columna mediante tomografía computarizada con un medio de contraste. Sin embargo, esta llamada mielo-TC expone al paciente a una cierta cantidad de radiación.

¡No todos los estrechamientos del canal espinal que son visibles en una resonancia magnética u otro procedimiento de imágenes realmente causan síntomas!

En algunos casos, el médico también realizará radiografías al paciente en posición de pie y en determinadas posturas (imágenes funcionales).

Se pueden utilizar exámenes electrofisiológicos para aclarar la estenosis del canal espinal. Entre ellos se incluyen, por ejemplo, la electromiografía (EMG) y los llamados potenciales evocados. Estos métodos ayudan a evaluar la función de los nervios.

Progresión y pronóstico

Incluso si no se trata, la estenosis del canal espinal suele progresar muy lentamente. El curso de la enfermedad también varía mucho según la causa. En algunos casos, el dolor causado por la presión sobre los tractos nerviosos permanece constante o disminuye con ciertos movimientos o con el tiempo. El dolor también puede aparecer y desaparecer constantemente. A veces, los síntomas incluso disminuyen con la edad a medida que la columna se vuelve menos móvil. Esto se debe a que los nervios se irritan con menos frecuencia, lo que significa que el dolor relacionado con el movimiento ocurre con menos frecuencia.

Sin embargo, en algunos casos la estenosis del canal espinal es aguda: si, por ejemplo, el tejido del disco intervertebral se desplaza (protrusión, prolapso), se produce inflamación capsular en la osteoartritis o se acumula líquido cerca de los tractos nerviosos, es posible que los síntomas de la estenosis espinal la estenosis del canal empeorará repentinamente. Un lado del cuerpo suele verse especialmente afectado.

En general, la estenosis del canal espinal se puede tratar bien en la mayoría de los casos con métodos terapéuticos conservadores, de modo que los afectados puedan llevar una vida relativamente libre de síntomas.

¿Estado de discapacidad grave por estenosis del canal espinal?

Si la estenosis del canal espinal no se puede tratar y conlleva limitaciones, es posible que se determine el llamado grado de discapacidad (GdB), en el sentido de reconocerla como una discapacidad grave. Por regla general, la oficina de pensiones competente determina dicho grado de invalidez previa solicitud.

En el caso de daños en la columna, esto depende de cada caso individual, en particular de la gravedad de la restricción de movimiento y de sus efectos.

Prevención

No se conoce ninguna prevención específica de la estenosis del canal espinal. Sin embargo, como generalmente se trata de una enfermedad de desgaste, se puede prevenir (al igual que la mayoría de las enfermedades de la espalda en general), al menos en principio, mediante los llamados comportamientos saludables para la espalda.