Medicamentos para niños: formas, dosis, consejos.

Sin embargo, desde 2007 existe una normativa de la UE sobre medicamentos adecuados para niños. Desde entonces, los fabricantes de medicamentos también han tenido que probar nuevos preparados en menores (a menos que sean preparados destinados únicamente a adultos, como los medicamentos para el agrandamiento de la próstata).

No adultos pequeños

Lo que ayuda a los adultos también puede perjudicar a los niños. Incluso los medicamentos supuestamente inofensivos y de venta libre pueden resultar peligrosos para los más pequeños. Por ejemplo, a los niños no se les debe dar ácido acetilsalicílico (AAS) para el dolor y la fiebre. El ingrediente activo puede provocar el síndrome de Reye, que pone en peligro la vida, en el que el cerebro y el hígado resultan gravemente dañados.

Formas de dosificación especiales

Por este motivo, los medicamentos suelen estar disponibles en formas farmacéuticas especiales para niños, por ejemplo en forma de gotas, zumo, polvo, granulados o supositorios. Pregúntele al pediatra qué forma de dosificación es mejor para su hijo. Luego, dígale si funcionó.

Consejos para los padres

Si necesita darle a su hijo gotas de medicamento que no deben diluirse, puede dárselas directamente en la boca con una jeringa (¡sin aguja!). Sin embargo, asegúrese de cumplir exactamente con la cantidad prescrita.

A los niños que necesitan tomar medicamentos con regularidad se les debe permitir decir qué forma farmacéutica les gusta más (siempre que existan varias alternativas).

Ya sean gotas, jugos, supositorios u otras formas farmacéuticas, respete siempre la dosis recomendada por el médico o farmacéutico. NUNCA cambie esto por su propia autoridad.

Emergencias con medicamentos