Hallux Valgus: Causas, Síntomas, Tratamiento

Breve descripción

  • ¿Qué es el hallux valgus? Desviación generalmente dolorosa del dedo gordo del pie (hallux médico) hacia el exterior del cuerpo (posición médica en valgo). Deformidad más común del antepié. Afecta principalmente a mujeres de mediana edad y mayores.
  • Síntomas: En la zona de la articulación metatarsofalángica, el dedo gordo del pie está inclinado hacia el exterior del cuerpo. En este punto aparecen dolor y una piel doblada y enrojecida.
  • Causas: por ejemplo, zapatos demasiado ajustados y/o demasiado altos, predisposición (tejido conectivo débil), pie extendido u otras deformidades preexistentes.
  • Tratamiento: métodos conservadores como gimnasia, férulas, soportes; si es necesario, cirugía para corregir la deformidad
  • Especialista responsable: ortopedista o cirujano del pie.
  • Pronóstico: Las medidas conservadoras pueden prevenir un aumento de la deformidad, pero no pueden revertirla. Esto sólo se puede lograr mediante cirugía (alta tasa de éxito).

Hallux valgus: tratamiento

Dependiendo de la gravedad de la deformidad del dedo gordo del pie, se pueden considerar diferentes formas de terapia de hallux valgus. Su objetivo es reducir el dolor existente, corregir la deformidad o evitar que progrese. La terapia también tiene como objetivo mantener o restaurar la funcionalidad normal del pie y del dedo gordo.

Tratamiento no quirúrgico del hallux valgus

Fisioterapia y ejercicios para los dedos de los pies.

Las personas con hallux valgus pueden actuar por sí mismas: definitivamente vale la pena probar los ejercicios regulares con los dedos de los pies. Fortalece los músculos y tendones del pie. Esto es especialmente útil en hallux valgus leves para evitar que la posición torcida se vuelva más pronunciada. Como medida preventiva, los ejercicios de los dedos de los pies pueden garantizar que la desalineación no se desarrolle en primer lugar.

Por ejemplo, puede pasar regularmente el pie sobre una pelota de tenis o la llamada pelota de erizo (una pelota de goma con “púas” redondeadas). Esto construye el arco transversal del pie. Caminar descalzo también fortalece las estructuras del pie, a menudo atrofiadas. Esto último se realiza mejor en terrenos irregulares como grava, arena, pasto o mantillo de corteza. Esto estimula más el pie que caminar sobre un terreno liso.

¡Pídale a su médico o fisioterapeuta que le muestre ejercicios adecuados para la terapia del hallux valgus en casa!

Férula de hallux valgus

Una férula de hallux valgus está diseñada para empujar el dedo gordo hacia el interior del pie, es decir, alejándolo de los otros dedos, aplicando presión mecánica. Al ajustar los músculos y tendones, las molestias se pueden reducir con el tiempo.

Existen diferentes sistemas y diseños de férulas para hallux valgus. Algunos sólo se usan por la noche. Otros también caben en zapatos normales confeccionados y se pueden usar durante el día.

Según los libros de texto actuales, las férulas no pueden corregir una deformidad existente, sino que sólo pueden aliviar el dolor y ralentizar la progresión de la deformidad.

Alternativas a la férula

Además de la férula para hallux valgus, existen otras opciones para el tratamiento no quirúrgico de la deformidad:

Un aparato ortopédico para hallux valgus es particularmente útil si el paciente no tolera bien una férula. El aparato ortopédico distribuye la presión sobre el dedo gordo de manera más uniforme. Sin embargo, el tamaño correcto del soporte es importante para una “medición de presión” correcta. Consulte a un especialista (p. ej., un técnico ortopédico) para que le asesore al respecto.

Los zapatos especiales para hallux valgus también pueden resultar útiles, especialmente para aliviar el dolor. Estos zapatos suelen tener más espacio en la zona del antepié que los zapatos normales. Esto significa que el antepié no se contrae.

También existen plantillas especiales para hallux valgus. Apoyan el mediopié con un cojín esférico (almohadilla) y así alivian la zona del antepié. Las plantillas se pueden usar con zapatos hallux valgus o con zapatos normales.

Existen otras opciones para el tratamiento conservador del hallux valgus. Además de los separadores de dedos, las almohadillas para los dedos y los rollos para juanetes, también incluyen cinta adhesiva:

Terapia de drogas

Si los pacientes con hallux valgus no pueden controlar su dolor de otra manera, pueden recurrir a analgésicos. Los médicos suelen recomendar medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE) como el ácido acetilsalicílico (AAS) o el ibuprofeno. ¡Pídele consejos a tu doctor!

Tratamiento quirúrgico del hallux valgus

Si los métodos de tratamiento conservadores no funcionan o el dolor es demasiado intenso, la cirugía también es una opción para el hallux valgus. En la actualidad existen entre 150 y 200 tipos diferentes de cirugía de hallux valgus. Sin embargo, sólo unos pocos de ellos se llevan a cabo en la práctica.

Los distintos procedimientos quirúrgicos suelen seguir un principio básico similar. El objetivo es restablecer las condiciones anatómicas normales lo mejor posible. El pie y el dedo gordo deberían volver a “funcionar” normalmente y el dolor debería desaparecer o al menos disminuir. Sin embargo, siempre depende de la posición inicial de cada individuo cuál es el objetivo quirúrgico posible con la cirugía del hallux.

Para las deformidades leves a moderadas del hallux valgus, el resultado suele ser bueno. Esto significa que el paciente está (y permanece) libre de dolor y el dedo gordo del pie está en una posición normal.

¿Cómo funciona la cirugía de hallux valgus?

Para planificar adecuadamente la operación es muy importante un reconocimiento médico y una radiografía del pie. Sin embargo, estos sólo ofrecen al médico una orientación aproximada. Por lo general, sólo puede evaluar la situación con precisión durante la operación, por ejemplo, el estado del cartílago de la articulación metatarsofalángica. Por este motivo, a menudo se deciden por un método quirúrgico concreto con poca antelación.

Básicamente, la cirugía de hallux valgus se realiza de la siguiente manera:

  • El médico libera la articulación metatarsofalángica del dedo gordo de la cápsula articular contraída y la libera de los tendones para que pueda moverse.
  • Se corta el hueso metatarsiano (osteotomía) y se mueve en dirección a los otros dedos del pie. Esto corrige la causa principal del hallux valgus: el ángulo excesivo entre los dos primeros huesos metatarsianos.
  • El hueso metatarsiano se fija en su lugar con pequeños tornillos al menos hasta que sane por completo. Sin embargo, por regla general permanecen permanentemente en el hueso (normalmente no causan ningún problema).
  • Finalmente, el médico elimina la inflamación típica por encima de la articulación metatarsofalángica (pseudoexostosis) y cierra la cápsula articular y las capas de tejido.

¿Qué ocurre después de la operación?

Después de la operación, el pie debe estar lo más aliviado posible durante al menos cuatro semanas. Esto permite que los ligamentos y los huesos sanen en reposo. Las medidas fisioterapéuticas también pueden apoyar la regeneración durante esta fase.

Luego, el pie se aclimata lentamente a la carga y distribución del peso durante cuatro semanas más. Después de unas ocho semanas, los afectados pueden volver a caminar con normalidad. El deporte debería poder volver a ser posible después de unas 12 semanas.

¿Cuáles son los riesgos de la operación?

En principio, la cirugía de hallux valgus es un procedimiento de bajo riesgo y normalmente de bajo impacto (métodos quirúrgicos mínimamente invasivos). Sin embargo, como ocurre con cualquier operación, existen algunos riesgos generales como sangrado o lesión de nervios o vasos sanguíneos.

Además, el dolor puede persistir a pesar de la cirugía de hallux valgus. A veces también hay una recaída (recurrencia): se vuelve a formar la malposición del dedo gordo. En muy raras ocasiones, los pacientes no toleran los tornillos de fijación utilizados (reacciones de intolerancia).

Como el pie está bastante lejos del corazón, la sangre también puede retroceder. Por lo tanto, no es inusual que el tejido del pie permanezca hinchado durante tres a 12 meses después de la cirugía de hallux valgus.

Hallux valgus: causas y factores de riesgo

  • Usar con frecuencia zapatos demasiado ajustados y/o con tacón alto: los dedos de los pies están comprimidos en estos zapatos. Un tacón alto también ejerce más presión sobre las articulaciones metatarsofalángicas.
  • Otras malposiciones del pie: el hallux valgus puede ser el resultado de un pie extendido, por ejemplo. En este caso, el arco transversal en la zona del antepié se aplana y los huesos metatarsianos se separan. Los callos en las plantas de los pies pueden ser un indicio de pie extendido, que a menudo no presenta síntomas.
  • Predisposición: Por lo general, varias personas de una familia se ven afectadas por el hallux valgus. Por tanto, los expertos creen que la deformidad o los factores que la favorecen pueden heredarse. Por lo tanto, los padres con (antiguo) hallux valgus deben controlar periódicamente los pies de sus hijos: las malas posiciones todavía se pueden corregir fácilmente en la infancia y la adolescencia.
  • Fuerza excesiva: si, por ejemplo, se golpea el pie con una puerta, etc., se pueden romper partes de la cápsula articular y las fuerzas de tracción en el pie pueden desequilibrarse. Esto puede resultar en hallux valgus. Cuanto mayor es el tirón en la “dirección equivocada”, más se desvía el dedo gordo, lo que a su vez aumenta el tirón y así sucesivamente.
  • Otros: Las enfermedades reumáticas, las deformidades congénitas o una fractura de hueso que ha cicatrizado en una posición incorrecta también pueden provocar (en casos raros) una curvatura del dedo gordo.

El hallux valgus se puede reconocer a simple vista por la deformidad típica: el dedo gordo del pie, en lugar de formar una línea casi recta, está inclinado hacia el exterior del cuerpo en la zona de la articulación metatarsofalángica hacia los dedos vecinos.

Además, la piel en este punto suele estar enrojecida y muy engrosada. A veces parece como si se hubiera formado un hueso nuevo allí. Es por eso que este síntoma de hallux valgus también se conoce como pseudoexostosis (griego: pseudês = falso; exostosis = crecimiento de sustancia ósea nueva). En realidad, sin embargo, no se trata de masa ósea, sino de la cabeza del metatarsiano, que se presiona hacia el borde interno del pie, y de la piel hinchada que se encuentra encima.

Una forma especial de hallux valgus es el llamado hallux valgus interphalangeus. En este caso, el ángulo entre los huesos metatarsianos es normal: sólo las falanges del dedo gordo se desvían en la dirección de los otros dedos.

¡El alcance de la deformidad no permite sacar conclusiones sobre la gravedad del dolor! A veces, incluso un hallux valgus ligeramente pronunciado provoca un dolor intenso. Otras personas sienten poco dolor a pesar de tener una deformidad grave. En ocasiones, el hallux valgus no causa ninguna molestia perceptible o restrictiva.

Hallux valgus: exámenes y diagnóstico.

No se requieren medidas de diagnóstico complejas para diagnosticar hallux valgus. Por regla general, basta con la mirada especializada de un médico, idealmente un ortopedista o un podólogo. Inspeccionarán su pie cuidadosamente y buscarán hinchazón, callos y la posición de los dedos y las articulaciones. También palparán el pie y sentirán su pulso.

En la mayoría de los casos, también se realiza una radiografía, estando de pie y con el peso del cuerpo sobre el pie (radiografía en carga). Esto permite determinar, por ejemplo, diferentes ángulos o el grado de artrosis.

Una resonancia magnética (resonancia magnética o resonancia magnética) del pie sólo se realiza en casos especiales.

Hallux valgus: progresión y pronóstico

Sin tratamiento, la deformidad del dedo gordo del pie en hallux valgus suele empeorar con el paso de los años. La presión constante sobre la articulación metatarsofalángica del dedo gordo también puede provocar su desgaste (artrosis).

Si la fisioterapia, las férulas, etc. no logran mejorar los síntomas lo suficiente y/o el dolor es intenso, se realiza una cirugía. La tasa de éxito es alta: según la literatura especializada, la cirugía de hallux valgus consigue un resultado muy bueno o bueno en aproximadamente el 85% de los pacientes tratados.

Tras la corrección quirúrgica de un hallux valgus, no podrás trabajar ni hacer deporte durante un determinado periodo de tiempo. La duración de esta fase depende de la profesión o disciplina de que se trate. En caso de trabajo físicamente extenuante, la pausa forzada puede durar hasta diez semanas. Debes esperar unas 12 semanas antes de hacer deporte. Los pacientes con hallux valgus pueden obtener recomendaciones más precisas de su médico.