Azúcar

En la producción industrial, el azúcar se agrega muy a menudo a los alimentos. El azúcar aquí se erige como sinónimo de todos los sacáridos de sabor dulce (azúcares simples y dobles) y también es el nombre comercial del doble azúcar sacarosa. Demasiada azúcar agregada tiene un efecto dañino en el cuerpo. Este último absorbe inmediatamente el azúcar en el torrente sanguíneo y causa la glucosa nivel (sangre azúcar) para aumentar bruscamente. Sin embargo, la "energía alta" es de corta duración, ya que es reemplazada por una baja poco después. El resultado es un renovado deseo de alimentos dulces. Este rápido ascenso y caída en glucosa niveles resulta en cambios de humor, somnolencia, dolores de cabeza y, en algunos casos, incluso depresión.. Complejo hidratos de carbono como los productos integrales, por otro lado, no causan sangre fluctuaciones de azúcar porque se absorben más lentamente en el torrente sanguíneo. El azúcar solo proporciona energía y, por lo tanto, solo "vacía calorías. " No contiene sustancias vitales, a diferencia del complejo. hidratos de carbono como productos integrales, arroz, trigo, maíz, patatas y otros productos con almidón, por lo que no satisface nuestras necesidades de sustancias vitales. En lugar de natural y saludAl promover los alimentos, nuestra sociedad hoy en día prefiere los alimentos de producción industrial y con alto contenido de azúcar porque suelen ser muy sabrosos y rápidos y fáciles de preparar para el consumo. La mayoría de los niños en la adolescencia cubren hasta el 20% de su ingesta energética diaria con azúcar, lo que significa que un considerable 20% de la energía no proviene vitaminas, minerales, oligoelementos y fibra. Si, por ejemplo, se consume muy poca vitamina B1, hidratos de carbono ya no se puede descomponer de manera óptima, ya que esta vitamina es necesaria para este propósito. Las consecuencias son problemas en el metabolismo, así como trastornos digestivos debido a los cuellos de botella de suministro que resultan de la deficiencia de sustancias vitales. El azúcar no solo pone en peligro los procesos metabólicos, sino que también daña los dientes. Si los alimentos contienen más del 1% de azúcar, esto promueve el desarrollo de caries.