Dermis (Piel): Función y Estructura

¿Qué es la dermis?

La dermis (corium) es la mitad de las tres capas que forman nuestra piel. Se encuentra debajo de la epidermis y encima de la subcutis. La dermis está formada por fibras de tejido conectivo y se divide en dos capas, que no están claramente delimitadas entre sí, sino que más bien se fusionan entre sí:

  • Estrato papilar: la capa externa adyacente a la epidermis.
  • Estrato reticular: la capa interna

¿Cuál es la función de la dermis?

La función de la dermis es anclar la epidermis. Además, la dermis suministra nutrientes a la epidermis (la epidermis en sí no tiene vasos).

estrato papilar

El estrato papilar está formado por tejido conectivo laxo y contiene, entre otras cosas, muchos capilares (vasos sanguíneos finos). Si hay un problema con el retorno venoso de la sangre, las venas agrandadas aparecen aquí como arañas vasculares.

El estrato papilar también es donde se encuentran la mayoría de las células sensoriales de la piel para la percepción del tacto y las vibraciones. Las células de defensa pueden moverse libremente en esta capa.

Estrato reticular (capa reticular)

La dirección de los haces de fibras determina las llamadas líneas de división de la piel: si la piel se lesiona a lo largo de una línea de división, la herida no se abre. Sin embargo, si la herida atraviesa una línea de hendidura, se abre. Los cirujanos utilizan estas líneas de división para lograr la formación de cicatrices lo más discreta posible.

Glándulas sebáceas

Las glándulas sebáceas producen el sebo que mantiene la piel flexible. Puedes leer más sobre ellas en el artículo Glándulas sebáceas.

Glándulas sudoríparas

La producción de sudor contribuye a la regulación del calor. Además, a través del sudor se puede liberar una pequeña cantidad de estas sustancias que, de otro modo, sólo se excretan a través de los riñones (como la sal común).

¿Qué problemas puede provocar la dermis?

Si se altera el retorno venoso de la sangre, se pueden desarrollar arañas vasculares en la dermis.

Debido a una acumulación de secreciones en los conductos excretores de las glándulas sebáceas, se forman los llamados puntos negros (comedones). En el acné vulgar, las glándulas sebáceas están inflamadas.

La dermis puede perder humedad con la edad, haciendo que la epidermis sea menos firme.