Melanoma maligno (cáncer de piel negra)

Melanoma maligno: síntomas

Cuanto antes se trate el peligroso cáncer de piel negra, más fácil será de curar. Pero, ¿cómo se puede reconocer el melanoma maligno? No es tan fácil, porque el melanoma maligno es muy diverso. Los médicos diferencian entre cuatro tipos principales de melanoma según su apariencia y características histológicas:

  • Melanoma de extensión superficial (aproximadamente el 60 por ciento de todos los casos de melanoma)
  • Melanoma nodular (aproximadamente el 20 por ciento de todos los casos de melanoma)
  • Melanoma lentigo maligno (aproximadamente el 10 por ciento de todos los casos de melanoma)
  • Melanoma acrolentiginoso (aproximadamente el 5 por ciento de todos los casos de melanoma)

El restante aproximadamente cinco por ciento de todos los casos de melanoma son formas más raras:

  • Melanoma amelanótico
  • Melanoma mucoso
  • Melanoma coroideo
  • Melanoma maligno inclasificable

Puede descubrir cómo son los tipos más comunes de melanoma en Cáncer de piel: síntomas.

En los hombres, el melanoma maligno suele desarrollarse en el torso (por ejemplo, en la espalda), mientras que en las mujeres tiende a desarrollarse en los brazos y las piernas. Sin embargo, el melanoma maligno puede desarrollarse en cualquier parte del cuerpo, no sólo en las zonas expuestas al sol. Por ejemplo, el tumor cutáneo maligno se encuentra a veces en la zona genital, en el cuero cabelludo velloso, en las plantas de los pies o debajo de las uñas de las manos o los pies.

Un melanoma maligno suele desarrollarse en piel que antes pasaba desapercibida. Por lo tanto, las “manchas oscuras” recién formadas en la piel deben controlarse estrechamente y, en caso de duda, consultar inmediatamente a un dermatólogo.

La llamada regla ABCDE ayuda a evaluar las manchas cutáneas recién formadas o ya congénitas.

Melanoma maligno: tratamiento

El tratamiento de un melanoma maligno en cada caso depende, entre otras cosas, del estadio del tumor. Sin embargo, en todos los casos, si es posible, el tumor se extirpa completamente quirúrgicamente, con un margen de seguridad de uno a dos centímetros. Esto significa que el cirujano corta el tejido sano para que queden la menor cantidad posible de células cancerosas.

Otra opción de tratamiento para el melanoma maligno es la inmunoterapia: después de que se han extirpado quirúrgicamente todos los crecimientos cancerosos visibles, se administra al paciente un medicamento que activa ciertas células inmunitarias (células asesinas) para que eliminen las células cancerosas restantes. Para ello se puede inyectar, por ejemplo, el principio activo interferón alfa (terapia con interferón).

Otra opción de tratamiento es la quimioterapia: se considera si las terapias inmunitarias o dirigidas no son una opción porque el paciente no responde a ellas.

Puede leer más sobre las opciones de tratamiento para el melanoma maligno en Cáncer de piel: tratamiento.

Melanoma maligno: posibilidades de curación

Gracias a la mejora de la detección precoz, el pronóstico del melanoma maligno ha mejorado significativamente en las últimas décadas. Hoy en día, el melanoma maligno suele detectarse en una fase muy temprana. Entonces casi siempre es curable. Sin embargo, a medida que avanza el tamaño y la extensión del tumor, las posibilidades de recuperación disminuyen rápidamente. Si las metástasis ya se han extendido a los pulmones, el hígado o el cerebro, el pronóstico del melanoma maligno es muy malo.

Las posibilidades de recuperación de un melanoma maligno también dependen de otros factores, como la edad del paciente y el estado de salud general.

Cáncer de piel negra: esperanza de vida

Alrededor de dos tercios de todos los melanomas se detectan tan temprano que pueden extirparse quirúrgicamente y los afectados se consideran curados. Cinco años después de haber sido diagnosticados con melanoma maligno, el 93 por ciento de las mujeres y el 91 por ciento de los hombres siguen vivos. Hasta aquí las estadísticas. En casos individuales, la esperanza de vida de un paciente con melanoma puede ser mayor o menor. Por ejemplo, si un melanoma maligno ya ha hecho metástasis en los pulmones o el cerebro, los pacientes pueden morir en cuestión de meses sin tratamiento.