Ictericia (ictericia): signos y causas

Breve descripción

  • Descripción: Coloración amarillenta de la piel, las membranas mucosas y la esclerótica de los ojos debido a la bilirrubina depositada. El pigmento marrón amarillento se forma como subproducto de la degradación de los glóbulos rojos viejos.
  • Causas: por ejemplo, inflamación del hígado (hepatitis), cirrosis hepática, cáncer de hígado y metástasis hepáticas, cálculos biliares, tumores biliares, anemia falciforme, válvulas cardíacas artificiales, insuficiencia cardíaca derecha, intoxicaciones, ciertos medicamentos.
  • ¿Cuándo consultar a un médico? Siempre – especialmente si el color amarillento de la piel, las mucosas o los ojos va acompañado de otros signos de advertencia como heces pálidas o grasas, orina oscura, fatiga, agotamiento, pérdida de rendimiento, pérdida de apetito, pérdida de peso no deseada, ascitis, fiebre. , confusión, desorientación, fuerte mal aliento.
  • Diagnóstico: entrevista para obtener historia clínica (anamnesis), examen físico, análisis de sangre, procedimientos de imagen como ecografía.

Ictericia: descripción

La ictericia (ictericia) no es una enfermedad, sino un síntoma. Se refiere a una coloración amarillenta de la piel, las mucosas y los ojos. A menudo, la inflamación del hígado (hepatitis) se equipara erróneamente con ictericia.

La descomposición de los glóbulos rojos (eritrocitos) influye en el desarrollo de la ictericia:

Los glóbulos rojos tienen una vida útil de unos 120 días. Después de eso, se descomponen en el hígado y el bazo. Un subproducto de este proceso es la bilirrubina. Este pigmento de color marrón amarillento es insoluble en agua. Para poder ser transportada con la sangre, se une a la gran molécula proteica albúmina, a la que los médicos llaman entonces bilirrubina indirecta. En el hígado, la bilirrubina se libera y se vuelve soluble en agua uniéndose al ácido glucurónico. En esta forma, se llama bilirrubina directa.

Depósito de bilirrubina en el tejido.

La concentración de bilirrubina en sangre normalmente es baja. Sin embargo, ciertos factores pueden aumentar los niveles de bilirrubina. Si los valores superan los 2 mg/dl (miligramos por decilitro), el tinte se deposita en el tejido. Esto se hace visible ante todo en los ojos: la esclerótica normalmente blanca se vuelve amarilla. Si la concentración de bilirrubina en la sangre continúa aumentando, la piel y las membranas mucosas también se vuelven amarillas.

Además de la coloración amarilla, la ictericia es característica del picor. En la hiperbilirrubinemia grave, incluso los órganos pueden adquirir un color amarillo.

Ictericia: causas

El hígado juega un papel importante en el desarrollo de la ictericia, ya que allí la bilirrubina se procesa químicamente y se transmite a la vesícula biliar para su posterior procesamiento. Sin embargo, la enfermedad hepática no siempre tiene por qué ser la causa de la ictericia. Por tanto, las causas se subdividen según tres aspectos:

Si el hígado no logra descomponer rápidamente la bilirrubina indirecta, ésta se deposita en el tejido, lo que provoca el típico color amarillento de la piel y los ojos. Dado que la causa no está en el hígado en sí, sino en procesos anteriores, los médicos también llaman a esta ictericia “prehepática”.

Suele estar causada por enfermedades de la sangre en las que los glóbulos rojos no viven tanto tiempo como es normal y, por tanto, se descomponen con mayor frecuencia. Un ejemplo de tal enfermedad es la anemia falciforme. Sin embargo, las válvulas cardíacas artificiales, las infecciones virales, las toxinas y ciertos medicamentos también pueden reducir la vida útil de los glóbulos rojos.

2. ictericia hepática

  • Hepatitis viral: los virus de la hepatitis (hepatitis A, B, C, D o E) a menudo causan inflamación aguda del hígado. Los síntomas incluyen fatiga, pérdida de peso, agotamiento, vómitos, náuseas, dolor abdominal e ictericia. También es típica la decoloración de las heces y la orina: las heces son de color claro y la orina de color oscuro. Si la hepatitis aguda se convierte en hepatitis crónica, esto puede provocar cirrosis hepática y cáncer de hígado. Hoy en día, la hepatitis B es una de las enfermedades infecciosas más comunes de la humanidad. Las vacunas contra la hepatitis A y B pueden proteger contra la infección.
  • Cirrosis hepática: las enfermedades hepáticas crónicas pueden cambiar la superficie del hígado. Esto conduce a una remodelación del órgano con extensas cicatrices. El hígado es cada vez menos capaz de realizar sus funciones. Las principales causas de la cirrosis hepática son la dependencia del alcohol y la hepatitis viral. Los síntomas aparecen muy tarde, pero provocan la muerte si no se tratan. La única terapia es el trasplante de hígado.
  • Metástasis hepáticas: el hígado es el órgano central del metabolismo del cuerpo. Por lo tanto, si un tumor canceroso se localiza en cualquier parte del cuerpo (p. ej., en el intestino), a menudo se desarrollan metástasis hijas en el hígado.
  • Envenenamiento: Comer hongos venenosos o sustancias químicas tóxicas puede dañar gravemente el hígado, provocando incluso insuficiencia hepática.
  • Medicamentos: muchos medicamentos se procesan en el hígado y pueden causar ictericia temporal.
  • Embarazo: Los ojos amarillos y la piel amarilla durante el embarazo pueden indicar intoxicación por embarazo (gestosis). Sin embargo, el hígado graso también puede estar detrás de esto.
  • Insuficiencia cardíaca del lado derecho: en el caso de insuficiencia cardíaca del lado derecho, la sangre puede regresar al hígado y dañar las células allí. Los individuos afectados desarrollan ictericia leve con ojos amarillos y retención de agua en las piernas y el abdomen.
  • Fiebre amarilla: En las zonas tropicales, el virus de la fiebre amarilla transmitido por mosquitos está muy extendido. En casos graves, puede provocar, entre otras cosas, insuficiencia hepática e ictericia. Entonces la enfermedad suele ser mortal.
  • Elevación congénita de los niveles de bilirrubina: algunas personas tienen hiperbilirrubinemia desde el nacimiento. Este es el caso, por ejemplo, de la inofensiva enfermedad de Meulengracht. Los individuos afectados producen muy poca enzima hepática responsable del procesamiento de la bilirrubina. El resultado es ictericia con ojos amarillos o piel de color amarillento a bronceado. Por lo demás, los afectados no tienen quejas. La enfermedad no requiere tratamiento médico.

3. ictericia colestásica (ictericia poshepática):

Las siguientes causas pueden obstruir el flujo de bilis:

  • Cálculos biliares en la vesícula biliar o en las vías biliares: las mujeres mayores de 40 años se ven especialmente afectadas. Además de la ictericia, los síntomas típicos de los cálculos biliares son dolor abdominal tipo cólico, así como náuseas y vómitos. A largo plazo, los cálculos biliares pueden convertirse en colecistitis (inflamación de la vesícula biliar) o pancreatitis (inflamación del páncreas).
  • Los tumores de vesícula biliar, duodeno o páncreas también pueden bloquear el conducto biliar. En la mayoría de los casos, la ictericia ocurre antes de que se desarrollen otros síntomas.

Ictericia: ¿Cuándo necesitas ver a un médico?

La piel, las mucosas o los ojos amarillos son alarmantes y siempre deben ser examinados por un médico. Esto es especialmente cierto si se añaden otros síntomas típicos de la ictericia:

  • El cansancio, la fatiga y la pérdida de rendimiento se encuentran entre las quejas inusuales de muchas enfermedades hepáticas.
  • Pérdida de apetito, pérdida de peso no deseada.
  • Hidropesía abdominal (ascitis): Aumento del perímetro abdominal en cirrosis o debilidad hepática.
  • El edema en las piernas indica insuficiencia cardíaca derecha.
  • La fiebre se nota en enfermedades inflamatorias agudas, como la hepatitis viral y la inflamación del páncreas o la vesícula biliar.
  • Las heces grasas suelen producirse como resultado de enfermedades biliares como los cálculos biliares (colelitiasis).
  • En las etapas finales de la cirrosis hepática o de la insuficiencia hepática pueden producirse nubosidad de la conciencia, confusión y desorientación. Estos síntomas dan lugar a lo que se conoce como coma hepático.
  • Fuerte mal aliento. Sin embargo, esto sólo ocurre en la insuficiencia hepática aguda.

Nota: La ictericia sin dolor y los síntomas que la acompañan pueden indicar un cáncer subyacente. Asegúrese de que un médico le aclare esto.

En una consulta personal para obtener tu historial médico, el médico primero te hará preguntas sobre tu estilo de vida, tu consumo de medicamentos, tus hábitos alimentarios y cualquier enfermedad previa. La información sobre estancias en el extranjero o embarazo también puede ayudar a localizar la causa de la ictericia. También debes hablar abiertamente sobre tu consumo de alcohol. Esto permitirá al médico sacar conclusiones importantes sobre el estado de su hígado.

También dígale al médico exactamente cuánto tiempo ha tenido los síntomas, si tiene dolor y si otros síntomas acompañan al color amarillento.

Los análisis de sangre también son informativos en caso de ictericia:

  • Si la bilirrubina se eleva a niveles superiores a 2 mg/dl (miligramos por decilitro), esto se nota en los ojos amarillos.
  • Los niveles elevados de glutamato piruvato transaminasa (GPT) indican daño hepático.
  • La glutamato oxalato transaminasa (GOT) puede estar elevada en la inflamación del hígado y la enfermedad biliar, pero también en un ataque cardíaco. El abuso crónico de alcohol también se refleja en niveles elevados.
  • La gamma-glutamil transferasa (gamma-GT) es una enzima hepática específica. Una lectura elevada puede deberse, por ejemplo, al consumo crónico de alcohol.
  • Además, existen valores sanguíneos del páncreas como la alfa-amilasa, que aumenta en caso de inflamación.

Es más probable que se utilicen imágenes más complejas, como la resonancia magnética (MRI) o la tomografía computarizada (CT), si se sospecha cáncer.

Se puede obtener total certeza tomando una muestra de tejido (biopsia). Esto requiere un pequeño procedimiento quirúrgico.

Nota: Una vez que el médico haya encontrado la causa de la ictericia, iniciará el tratamiento adecuado.

Ictericia: ¿Qué puedes hacer tú mismo?

Si la ictericia se nota a través de ojos amarillos o un color de piel amarillento, lo único que se puede hacer es acudir al médico. Es necesario descubrir la causa y tratar adecuadamente la ictericia. No existen remedios caseros ni otros métodos contra la ictericia; la única terapia es el tratamiento de la enfermedad subyacente.

Sin embargo, puedes intentar prevenir la ictericia con algunas medidas:

  • Protéjase contra la hepatitis: Al vacunarse contra la hepatitis A y B, puede eliminar dos peligros a la vez.
  • Viaja inteligentemente: Familiarízate con las costumbres y peligros de tu destino, especialmente si es una zona de riesgo de hepatitis. Una mala higiene hace que el virus de la hepatitis se transmita con especial rapidez a través de alimentos contaminados. Pero también hay que tener cuidado con los mosquitos y las enfermedades tropicales. Tenga en cuenta las recomendaciones de vacunación específicas de cada país. Su médico podrá aconsejarle.
  • Disfrute del alcohol con moderación: para las mujeres sanas, un vaso estándar de alcohol al día (p. ej., un vaso de vino o una cerveza pequeña) se considera de bajo riesgo. Para hombres sanos, el doble de esa cantidad es médicamente aceptable.

Preguntas frecuentes

Puedes encontrar las respuestas a las preguntas más frecuentes sobre este tema en nuestro artículo Preguntas frecuentes sobre la ictericia.