Deficiencia de zinc: síntomas, causas, tratamiento

Deficiencia de zinc: síntomas

El zinc es un oligoelemento vital que participa en muchos procesos del cuerpo humano, como la división celular, la cicatrización de heridas y la defensa inmunitaria. En consecuencia, los síntomas de la deficiencia de zinc pueden variar. Posibles son por ejemplo:

  • Cambios en la piel (dermatitis = inflamación de la piel)
  • deterioro de la cicatrización de heridas
  • la pérdida de cabello
  • pérdida de apetito
  • Sentido del gusto reducido
  • diarrea
  • retraso del crecimiento
  • mayor susceptibilidad a las infecciones

Si detrás de la deficiencia de zinc hay un trastorno congénito de la absorción, se puede desarrollar la llamada acrodermatitis enteropática. Los individuos afectados desarrollan los siguientes síntomas ya en los primeros meses de vida:

  • erupción cutánea simétrica alrededor de los orificios, en las manos, los pies y la cabeza
  • cambios en la mucosa, por ejemplo gingivitis (inflamación de las encías)
  • crecimiento retardado
  • mayor susceptibilidad a las infecciones
  • trastornos del sistema nervioso

La deficiencia de zinc es difícil de detectar

Muchos de los síntomas mencionados no son específicos de una deficiencia de zinc, sino que también ocurren en otras enfermedades o estados carenciales. Una deficiencia de zinc es difícil de determinar claramente, porque el zinc como oligoelemento sólo está presente en la sangre en concentraciones muy bajas. Por lo tanto, la desaparición de los síntomas después de añadir zinc es un signo de una deficiencia de zinc.

Conexión con otros trastornos.

  • En un estudio, los investigadores encontraron que los niños con TDAH suelen tener niveles bajos de zinc y cobre.
  • Un análisis resumido de varios estudios (metanálisis) mostró que las personas con depresión suelen tener niveles bajos de zinc en la sangre.
  • Los científicos chinos descubrieron que el líquido seminal de los hombres con baja fertilidad suele tener niveles bajos de zinc.

Deficiencia de zinc: causas

Con una dieta equilibrada se satisfacen fácilmente las necesidades de zinc recomendadas por las sociedades de nutrición alemana, austriaca y suiza (valor de referencia DACH). Por lo tanto, el riesgo de deficiencia de zinc en este país es extremadamente bajo.

Pero hay excepciones. Por ejemplo, un aporte suficiente de zinc es fundamental para los atletas de competición, ya que excretan una mayor cantidad de este oligoelemento, por ejemplo a través del sudor y la orina. Sin embargo, el zinc juega un papel importante en el desarrollo muscular. Por lo tanto, los deportistas de competición deberían prestar especial atención a una ingesta adecuada de zinc.

Independientemente de esto, una deficiencia de zinc puede deberse a las siguientes causas:

  • Enfermedades inflamatorias intestinales crónicas: incluyen la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, por ejemplo. Restringen la capacidad del intestino para absorber nutrientes.
  • Alto consumo de fitato: El fitato es una sustancia de las plantas que se necesita, por ejemplo, para la fotosíntesis. En el intestino humano, impide la absorción del zinc porque se une al oligoelemento. Por lo tanto, los vegetarianos y veganos que comen principal o exclusivamente productos vegetales deben prestar especial atención a su aporte de zinc.

Una deficiencia de zinc relacionada con los fitatos se puede prevenir con relativa facilidad consumiendo únicamente productos germinados, acidificados, fermentados o remojados. Este procesamiento descompone el fitato contenido en los alimentos vegetales.

Corregir la deficiencia de zinc

Si hay posibles signos de deficiencia de zinc, a veces es suficiente incluir específicamente en la dieta alimentos ricos en zinc (como carne, legumbres, etc.). Sin embargo, en determinadas circunstancias puede ser aconsejable o necesario tomar suplementos de zinc, por ejemplo en el caso de trastornos congénitos de la absorción de zinc relacionados con enfermedades o. Sin embargo, los suplementos de zinc sólo deben tomarse previa consulta con un médico. Una ingesta excesiva de zinc puede provocar una sobredosis y, por tanto, síntomas de intoxicación.

¿Ingesta preventiva de zinc?

En general, tampoco se recomienda tomar suplementos de zinc como medida preventiva durante el embarazo y la lactancia. Aunque en estas fases el cuerpo necesita más oligoelemento de lo normal, una dieta equilibrada suele ser suficiente para asegurar el suministro y prevenir una deficiencia de zinc.