¿La rosácea es contagiosa? | Rosácea

¿La rosácea es contagiosa?

¡No! Aunque es una inflamación, no hay peligro de infectarse. Ni la tos ni el contacto con la piel pueden transmitir rosácea.

¡Si y no! Aunque rosácea no es directamente hereditario, algunas familias tienen una mayor incidencia de precursores de la rosácea. No está claro si esto se debe a un factor aún desconocido. Sin embargo, si la enfermedad estalla y si los niños suelen tener recaídas depende de los factores mencionados anteriormente.

Pronóstico - ¿Es curable la rosácea?

Dado que se desconoce la causa, rosácea no se puede curar por completo. La rosácea es una de las enfermedades cutáneas inflamatorias crónicas. Solo es posible el tratamiento sintomático y el retraso de la progresión de la enfermedad.

Por lo tanto, el curso de la enfermedad solo se puede influir de forma limitada. Se habla de un curso recurrente. Sin embargo, un inicio temprano y adecuado del tratamiento puede contener fácilmente los síntomas.

Un tratamiento eficaz consta de varios componentes. Estos pueden consistir en consultas e instrucciones individuales sobre protección UV, limpieza y cuidado de la piel, tratamiento farmacológico local y sistémico y medidas quirúrgicas o láser-quirúrgicas. La rosácea se puede controlar bien con medidas individuales que se aplican según sea necesario.

Incluso en las etapas avanzadas, existen posibilidades, por lo que la enfermedad limita la rutina diaria. En aproximadamente el 20 por ciento de los pacientes, los ojos se ven afectados primero, antes de que aparezcan los síntomas cutáneos. Dado que esta afectación de los ojos también puede conducir a ceguera en casos raros, se debe consultar a un oftalmólogo además del dermatólogo.

Profilaxis

Es importante evitar los factores de riesgo y los desencadenantes. Estos incluyen, por ejemplo: la luz solar directa que irrita la piel con luz ultravioleta. Si se conoce la sensibilidad, la protección solar puede ayudar.

En verano, el sol también debe evitarse por completo alrededor del mediodía. Las irritaciones de los cosméticos son bastante comunes. Por tanto, deben evitarse los agentes agresivos.

El alcohol también parece irritar el sangre vasos en la cara. Por lo tanto, el alcohol solo debe consumirse con moderación. Lo mismo se aplica a las comidas picantes y las bebidas calientes. Los alimentos demasiado picantes estimulan la regulación de la temperatura de la piel y dilatan la sangre vasos, que puede causar rubor. Menos evitable es el estrés psicológico, también conocido como desencadenante de la rosácea.