Desvío biliopancreático: proceso y riesgos

¿Qué es la desviación biliopancreática?

El término “desviación biliopancreática” se refiere al hecho de que las secreciones digestivas de la bilis (bilis) y el páncreas no llegan a la pulpa alimenticia hasta la parte inferior del intestino delgado. Esto impide la descomposición de los nutrientes y sólo se absorben desde el intestino delgado a la sangre en cantidades mucho menores.

¿Qué sucede como resultado de la desviación biliopancreática?

Sin embargo, debido a la desviación biliopancreática, sólo se introducen mucho más abajo en el intestino delgado. Sólo a partir de aquí se mezclan la pulpa de los alimentos y los jugos digestivos. Esto significa que sólo se dispone de una sección corta del intestino y mucho menos tiempo para la descomposición y absorción de los alimentos; por lo tanto, una gran proporción de los nutrientes migra sin digerir al intestino grueso y se excreta en las heces.

Procedimiento quirúrgico para la derivación biliopancreática.

Preparación para la derivación biliopancreática.

Procedimiento de operación

La derivación biliopancreática se produce en varios pasos quirúrgicos. Bajo anestesia general, el cirujano introduce los instrumentos y una cámara con una fuente de luz en la cavidad abdominal a través de varias incisiones en la piel. Durante la operación, también se introduce dióxido de carbono gaseoso en la cavidad abdominal para que la pared abdominal se levante ligeramente de los órganos y el cirujano tenga mejor visibilidad y más espacio en la cavidad abdominal.

A continuación, el cirujano corta el intestino delgado unos 2.5 metros antes del comienzo del intestino grueso. Ahora se levanta la parte inferior y se sutura directamente a la bolsa gástrica o al estómago tubular. La parte superior del intestino delgado ya no tiene conexión con el estómago y en el futuro sólo servirá para transportar las secreciones digestivas de la bilis y el páncreas. Ahora se lleva al intestino delgado, a unos 50 centímetros por encima del colon, y se sutura.

Duración de la cirugía, estancia hospitalaria e incapacidad laboral.

La derivación biliopancreática dura entre dos y tres horas y siempre se realiza bajo anestesia general. La operación suele requerir una estancia hospitalaria de unos ocho días: uno de preparación y siete de estrecha observación médica después de la operación. Por término medio, es posible retomar la actividad profesional unas tres semanas después de la operación si el proceso no presenta complicaciones.

La derivación biliopancreática es un procedimiento para personas con obesidad y un índice de masa corporal (IMC) ≥ 40 kg/m² (obesidad grado III). Si ya existen enfermedades metabólicas como diabetes, hipertensión arterial o síndrome de apnea del sueño debido al exceso de peso, la derivación biliopancreática puede ser útil a partir de un IMC de 35 kg/m².

En personas con obesidad extrema (IMC > 50 kg/m²), la operación a veces también se divide en dos operaciones: en primer lugar, solo se crea el estómago tubular. Esto tiene como objetivo reducir el peso y, por tanto, el riesgo quirúrgico de la segunda operación (la derivación biliopancreática propiamente dicha).

¿Para quién no es apropiada la derivación biliopancreática?

Eficacia de la derivación biliopancreática

Ventajas de la derivación biliopancreática frente a otros procedimientos

Desventajas y efectos secundarios del procedimiento.

La división biliopancreática es un procedimiento quirúrgicamente exigente. En comparación con la cirugía de estómago tubular, requiere muchas más incisiones y suturas. La interferencia con el sistema digestivo es muy pronunciada y no completamente reversible después de una pérdida de peso exitosa. Por lo tanto, uno debe estar familiarizado con los posibles efectos secundarios antes del procedimiento. La gravedad de estos en casos individuales varía de persona a persona:

Por lo tanto, la administración regular de vitamina B-12 en el músculo o en la sangre a través de la vena es necesaria durante toda la vida. También se encuentran disponibles preparaciones de vitamina B-12 que se absorben directamente a través de la mucosa oral (aplicación sublingual), pero su eficacia es cuestionable. Aún no se ha aclarado con certeza por qué puede ocurrir una deficiencia de vitamina D después de la derivación biliopancreática.

Síndrome de dumping: El término síndrome de dumping se utiliza para describir la combinación de varios síntomas que pueden resultar del vaciado precipitado de alimentos ligeramente predigeridos del resto del estómago al intestino delgado. Como falta la puerta del estómago, la papilla alimenticia concentrada pasa directamente al intestino delgado. Allí, siguiendo leyes físicas (ósmosis), extrae agua de los tejidos y vasos sanguíneos circundantes hacia el intestino.

El síndrome de dumping se produce principalmente después de la ingesta de alimentos osmóticamente muy activos (hiperosmolares), por ejemplo, bebidas azucaradas o después de comidas grasas. El síndrome de dumping se previene con PBD-DS (ver arriba). En esta variante de derivación biliopancreática se conserva el portal gástrico.

Desviación biliopancreática: riesgos y complicaciones

La derivación biliopancreática conlleva varios riesgos quirúrgicos generales y específicos. Éstas incluyen:

  • riesgos de la anestesia general
  • Trombosis de las venas profundas de las piernas con riesgo de embolia pulmonar.
  • Infecciones en la zona de las suturas externas y de las heridas.
  • Fuga de suturas de órganos en la bolsa gástrica/estómago tubular o intestino delgado (insuficiencia de sutura) con riesgo de peritonitis

Dieta después de la cirugía.

Tras la derivación biliopancreática es necesario un cambio básico en la dieta para evitar problemas digestivos. Aparte de eso, cuanto más baja sea la dieta en grasas y calorías después de la cirugía, más pronunciada será la pérdida de peso. Se deben seguir las siguientes reglas dietéticas de por vida después de la derivación biliopancreática:

  • Las comidas deben incluir sólo porciones pequeñas (tamaño de estómago reducido).
  • Se deben evitar los alimentos o bebidas azucarados y las carnes con fibra muy larga.
  • Los complementos alimenticios (especialmente vitamina D, vitamina B12) deben tomarse de por vida.

A veces, los medicamentos también se absorben de manera diferente o en cantidades más pequeñas de ingredientes activos. Por lo tanto, la derivación biliopancreática puede requerir un ajuste del momento y la dosis de los medicamentos.