Tratamiento de la bursitis | Fisioterapia para bursitis de cadera.

Tratamiento de la bursitis

En la fase aguda de bursitis, es particularmente importante cuidar la articulación afectada para no agravar la inflamación por una mayor irritación por estrés. Esto también es importante por la razón bursitis puede volverse crónica, es decir, se desarrolla una inflamación permanente si la inmovilización es insuficiente. Analgésicos y se suelen recetar medicamentos antiinflamatorios para aliviar al paciente y contener la inflamación.

El frío en forma de bolsas de hielo también se utiliza para ralentizar el proceso inflamatorio y reducir la dolor.Si el dolor no puede controlarse lo suficiente, es importante excluir una infección y tratarla con un cortisona inyección en la articulación afectada si es necesario. Si un persistente inflamación de la cadera se produce la articulación, que no puede aliviarse con los procedimientos antes mencionados, la cirugía permanece como una opción terapéutica. En este caso, se extrae toda la bursa o se intenta tratar la bursa localmente mediante un procedimiento mínimamente invasivo.

Una vez finalizada la fase aguda de la inflamación, se pueden iniciar medidas de apoyo como la fisioterapia. Existen diferentes enfoques de tratamiento: Choque Terapia de ondas: ondas mecánico-acústicas que aceleran el proceso de curación. Ultrasonido terapia: el calor generado directamente en la bolsa ayuda a que la inflamación se cure más rápido y dolor es relevante. Terapia con láser: la luz de alta intensidad penetra profundamente en el tejido de la bursa y estimula los procesos metabólicos allí, lo que también acelera el proceso de curación.

Terapia manual: una gran cantidad de técnicas diferentes que alivian la bolsa mediante presión, tracción, se extiende y fuerza, aumenta la movilidad y fortalece los músculos circundantes. En general, es importante que el paciente no pierda la motivación incluso después de una terapia exitosa y que aplique los ejercicios aprendidos en el tratamiento fisioterapéutico en la vida cotidiana. De esta manera, se puede evitar una nueva postura incorrecta y una carga incorrecta y la articulación es menos propensa a lesionarse.

. Una vez finalizada la fase aguda de la inflamación, se pueden iniciar medidas de apoyo como la fisioterapia. Existen diferentes enfoques de tratamiento: Choque Terapia de ondas: ondas mecánico-acústicas que aceleran el proceso de curación. Ultrasonido Terapia: el calor generado directamente en la bursa ayuda a que la inflamación se cure más rápido y alivia el dolor.

Terapia con láser: la luz de alta intensidad penetra profundamente en el tejido de la bursa y estimula los procesos metabólicos allí, lo que también acelera el proceso de curación. Terapia manual: una gran cantidad de técnicas diferentes que alivian la bolsa mediante presión, tracción, se extiende y fuerza, aumenta la movilidad y fortalece los músculos circundantes. En general, es importante que el paciente no pierda la motivación incluso después de una terapia exitosa y que aplique los ejercicios aprendidos en el tratamiento fisioterapéutico en la vida cotidiana. De esta manera, se puede evitar una nueva postura incorrecta y una carga incorrecta y la articulación es menos propensa a lesionarse.

  • Terapia de ondas de choque: ondas mecánico-acústicas que aceleran el proceso de curación.
  • Ultrasonido Terapia: El calor generado directamente en la bursa ayuda a que la inflamación se cure más rápido y alivia el dolor.
  • Terapia con láser: La luz de alta intensidad penetra profundamente en el tejido de la bursa y estimula los procesos metabólicos allí, lo que también acelera la cicatrización.
  • Terapia manual: una gran cantidad de técnicas diferentes que utilizan presión, tracción, estiramiento y fortalecimiento de la fuerza para aliviar la bursa, aumentar la movilidad y fortalecer los músculos circundantes.