Síndrome de Reiter

Sinónimos: artritis reactiva, enfermedad de Reiter, poliartritis uretral, síndrome uretro-conjuntivo-sinovial

Definición

El síndrome de Reiter describe una enfermedad inflamatoria de las articulaciones que puede ocurrir como una enfermedad secundaria después de la inflamación del tracto gastrointestinal o del tracto urogenital (tracto urinario). En realidad, el síndrome de Reiter comprende tres o cuatro síntomas principales y se considera una forma especial de reactiva. artritis.

Causas

Antes de que ocurra el síndrome de Reiter, el paciente primero tiene una infección bacteriana. Esta infección puede ser, por ejemplo, una infección del tracto urinario (uretritis), que es causada por Neisseria gonorrhea, o una no gonorrea infección del tracto urinario causada por Chlamydia trachomatis, mycoplasmas o ureaplasmas. Asimismo, una infección gastrointestinal causada por Yersinia, Salmonella,, Shigella (la llamada disentería), Campylobacter jejuni o patógenos de enteritis también pueden ser la enfermedad previa.

Además, existe una predisposición genética en el 60-80% de los casos. Esto significa que los pacientes afectados tienen un cambio en un rasgo antigénico. Estos pacientes son positivos para HLA-B27. En la población normal, este gen solo se pronuncia en un 8%. Después de una infección bacteriana del tracto gastrointestinal o del tracto urinario, puede ocurrir una enfermedad reactiva con el síndrome de Reiter después de 2 a 6 semanas.

Diagnóstico

Para realizar el diagnóstico se realiza en primer lugar una anamnesis con interrogatorio específico tras una infección previa del tracto urinario o del tracto gastrointestinal. Además, los síntomas típicos (tríada de Reiter) pueden llevar a un diagnóstico de síndrome de Reiter. También se puede realizar un examen de laboratorio.

En la mayoría de los casos, los parámetros de inflamación como un aumento sangre velocidad de sedimentación (BSG) y un elevado Valor de CRP (Proteína C reactiva). Sin embargo, estos son muy poco específicos. Se puede organizar un examen genético, en el que se busca la detección de HLA-B27.

En el 80% de los casos esto es positivo. Suele ser difícil detectar el patógeno, ya que la infección aguda suele producirse hace unas semanas y por tanto no los gérmenes se encuentran en la orina (en el caso de infección del tracto urinario) o heces (en el caso de una infección gastrointestinal). En casos individuales y dependiendo del germen, esto aún se puede probar con ciertos procedimientos.

En el diagnóstico serológico, también se puede determinar posteriormente el curso de una infección. Esto implica la detección de IgA e IgG. anticuerpos existentes sangre. Tales títulos paralelos indicarían una infección existente, pero no siempre se encuentran o detectan en el sangre.

El 2-3% de los pacientes que han tenido ciertas infecciones gastrointestinales o del tracto urinario antes, muestran el síndrome de Reiter posteriormente. Dependiendo de la literatura, la distribución de género entre hombres y mujeres se da 1: 1, 3: 1 o 20: 1. El síndrome de Reiter ocurre principalmente en la vida entre los 20 y los 40 años.