Cambios fenotípicos: función, tarea y enfermedades

La aparición de un organismo se denomina fenotipo. En este contexto, el fenotipo está determinado tanto genéticamente como por el medio ambiente. Los cambios fenotípicos naturales en un organismo generalmente son causados ​​por factores ambientales.

¿Qué es el cambio fenotípico?

Los cambios fenotípicos naturales en un organismo generalmente son causados ​​por factores ambientales. Los cambios fenotípicos pueden ocurrir en un organismo individual o dentro de una población de organismos. Cada organismo individual nace inicialmente con un fenotipo particular, que está determinado por su composición genética. Sin embargo, cuando consideramos la composición genética por sí sola, hablamos de genotipo. En el transcurso de la vida, este genotipo cambia constantemente por influencias ambientales, lo que provoca la apariencia fenotípica. También está siempre en un estado de cambio. En este caso hablamos de modificación. Sin embargo, dentro de una población de organismos vivos, los cambios fenotípicos de los organismos también pueden ocurrir debido a cambios genéticos. Estos son procesos de epigenética y evolución. El fenotipo incluye todas las apariencias externas, como el tamaño, pelo color, piel color o color de ojos. Las características internas (fisiológicas) se refieren al funcionamiento de la órganos internos, la estructura de la musculatura y también la aparición de ciertas enfermedades. A diferencia del genotipo, los rasgos de comportamiento en particular también pertenecen al fenotipo. Algunas características están determinadas genéticamente y no se pueden cambiar (por ejemplo, el color de los ojos). Otros rasgos son más variables y están sujetos a modificaciones en el curso de la vida. Estos incluyen el peso, por ejemplo.

Función y tarea

Cada organismo individual sufre varios cambios fenotípicos durante el desarrollo físico. Ya durante el desarrollo humano, por ejemplo, se producen cambios que se manifiestan en su tamaño o madurez sexual. Sin embargo, estos cambios están preprogramados genéticamente. Son causados, entre otras cosas, por cambios hormonales internos (por ejemplo, durante la pubertad). Sin embargo, cómo se producen estos cambios y qué cambios fenotípicos se producen, depende a su vez de influencias externas. Por ejemplo, el crecimiento está influenciado por el estado nutricional, así como por otros factores. Cuanto mejor sea la nutrición, más alto puede llegar a ser el individuo. El peso corporal también es muy variable. Además, el comportamiento depende principalmente de la influencia educativa de los padres y la escuela, así como de factores sociales. Cada rasgo está genéticamente predispuesto, pero si esta predisposición se recupera depende de las influencias ambientales. Por tanto, existen predisposiciones a un mayor peso corporal, a la altura, pero también a determinados rasgos de comportamiento. Sin embargo, muchos rasgos físicos también se desarrollan de manera diferente en diferentes entornos. Por ejemplo, los gemelos idénticos con el mismo genotipo pueden desarrollarse de manera completamente diferente en diferentes entornos. También puede haber desviaciones en la apariencia. La vida posterior a menudo determina aptitud e incluso salud desarrollo. Esta variabilidad fenológica suele ser muy útil. Permite una reacción flexible a diferentes influencias ambientales. Por ejemplo, los humanos pueden adquirir experiencia e incorporarla a su comportamiento. Al cambiar gradualmente la forma en que responde a los estímulos ambientales, se le forma la oportunidad de reaccionar con flexibilidad. Sin esta flexibilidad, la sociedad humana no podría haberse desarrollado de esta forma. El grado en que los estímulos ambientales pueden influir en el fenotipo también se denomina norma de reacción. Esta norma de reacción de los rasgos individuales, a su vez, está determinada genéticamente. Por ejemplo, la variabilidad del peso fue vital en poblaciones humanas anteriores. Por ejemplo, los períodos de hambre se pueden salvar creando primero reservas corporales. En sociedades con suficiente suministro de alimentos, sin embargo, esta posibilidad de variación ha perdido su necesidad. En los cambios fenotípicos, el genotipo del organismo individual no se altera. Sin embargo, según los hallazgos actuales, los procesos epigenéticos juegan un papel. Como parte de estos procesos, ciertos genes se activan preferentemente y otros se inactivan. Epigenética establece los límites dentro de los cuales pueden ocurrir los cambios fenotípicos de un organismo. También cabe mencionar que dentro de una población de organismos, debido a cambios en el medio ambiente, los cambios genéticos (mutaciones) también se prefieren a varias generaciones, que están mejor adaptadas a las nuevas ambiente. En este caso, los cambios fenotípicos dentro de la población también tienen como base cambios genéticos reales.

Enfermedades y trastornos

Los cambios fenotípicos no siempre son deseables. Esto es particularmente evidente en el ejemplo del peso corporal. El peso corporal representa una característica corporal muy variable. Genéticamente, existe una predisposición a obesidad, pero con una caloría normal dieta y actividad física adecuada, el peso no aumentará. Sin embargo, también hay personas que no pueden aumentar de peso debido a la adaptación metabólica a la ingesta energética. Como es conocido exceso de peso es un riesgo para salud. Si se trata del brote de ciertas enfermedades, entonces todavía depende del estilo de vida y otras predisposiciones determinadas genéticamente. Por ejemplo, no todas las personas obesas desarrollan diabetes mellitus. Además, pueden existir factores hereditarios para los trastornos lipometabólicos, pero estos solo surten efecto con un determinado estilo de vida. Las enfermedades cardiovasculares también dependen del estilo de vida, el peso corporal y las predisposiciones genéticas. Por el contrario, un estilo de vida muy saludable puede prevenir la aparición de una enfermedad genéticamente predispuesta. Por lo tanto, las condiciones ambientales adecuadas a menudo influyen en la duración y la calidad de vida, aunque una constelación genética en particular puede no resultar favorable. Incluso las personas con obviamente enfermedades genéticas a veces puede desarrollarse muy bien con un buen apoyo y terapia forestal. En el caso del trastorno metabólico determinado genéticamente fenilcetonuria, por ejemplo, un especial dieta solo tiene que ser seguido durante la infancia para evitar que aparezcan los síntomas. Las predisposiciones relacionadas con las hormonas también pueden Lead a cambios físicos significativos. Por ejemplo, en las mujeres, aumentó testosterona La producción en las glándulas suprarrenales puede resultar en una apariencia más masculina. Por el contrario, los hombres pueden desarrollar características sexuales femeninas secundarias como resultado del aumento de la producción de estrógenos. Sin embargo, esto no es un salud o preocupación médica, pero es simplemente una posible variación. Las únicas desventajas de esta variación surgen de la interpretación social de que esto es anormal.