Manchas de pigmento

Las manchas de pigmento (sin. Nevo de pigmento, nevo de melanocito, nevo melanocítico) son una malformación inicialmente benigna de la piel, que se desarrolla a partir de melanocitos productores de pigmento o células relacionadas. Por esta razón, las manchas de pigmento a menudo se tiñen de marrón. Existen numerosos subtipos de manchas pigmentarias benignas, que en algunos casos degeneran y, por tanto, pueden volverse malignas. Trastornos de la pigmentación de la cara y cuello son particularmente comunes.

Eliminar manchas de pigmentación

La mayoría de las trastornos de la pigmentación son completamente inofensivos y, como mucho, son un problema cosmético. Por esta razón, rara vez es necesario eliminar las manchas de pigmento. Sin embargo, si se toma la decisión de tratar las manchas de pigmentación, existen varios procedimientos para elegir.

El tratamiento con láser es muy eficaz, en el que las acumulaciones de pigmento se descomponen por la energía combinada del láser y luego los restos se descomponen con blanco sangre células. Otra opción es la terapia de frío (criopeeling) con nitrógeno líquido o el tratamiento con ácidos. Estos hacen que las capas superiores de la piel mueran para que puedan eliminarse junto con el melanina contenidos en ellos.

Sin embargo, la piel sensible tiende a formar nuevas manchas de pigmento en el período siguiente y debe protegerse particularmente de la luz solar. Una forma muy extendida de tratamiento para las manchas de pigmentación es también el uso de cremas blanqueadoras a base de rocinol, hidroquinona o ácido kójico, que, sin embargo, son potencialmente peligrosas para salud ya menudo no tienen suficiente efecto. Además de los aspectos cosméticos, una degeneración de las manchas de pigmento también puede ser una razón para eliminarlas. Las características llamativas suelen ser difíciles de reconocer para el profano. Sin embargo, es aconsejable estar atento trastornos de la pigmentación y prestar especial atención a los cambios en las manchas de pigmento.

Manchas de pigmento láser

Los procedimientos con láser son un método muy eficaz para tratar los trastornos de la pigmentación, en los que las acumulaciones de pigmento se rompen por la energía combinada del láser y los restos son luego descompuestos por las células inmunes. Hay varios tipos de láseres disponibles para este propósito, como rubí, erbio, KTP o fraxellaser. Se diferencian en longitud de onda y profundidad de penetración.

Suelen ser necesarias varias sesiones para eliminar por completo las manchas de pigmento. Si es suficiente aclarar el trastorno de la pigmentación, puede ser suficiente un solo tratamiento con láser. Es mejor realizar dicho tratamiento en otoño o invierno, ya que el Radiación UV es más bajo durante estas temporadas.

Vale la pena mencionarlo porque la piel es muy sensible después de un tratamiento con láser. Además, la piel debe tratarse diariamente con protector solar durante al menos ocho semanas después del tratamiento con láser. El tratamiento con láser siempre conlleva el riesgo de dejar cicatrices y, por lo tanto, debe usarse con precaución. El coste del tratamiento con láser de las marcas de pigmentación es de unos 100 euros por sesión.