Inflamación de las encías: Definición, remedios caseros

Breve descripción

  • Tratamiento: Higiene bucal cuidadosa, limpieza por parte de un dentista si es necesario.
  • Causas y factores de riesgo: Generalmente falta de higiene bucal, a veces irritación/lesiones mecánicas en la boca, cambios hormonales, trastornos metabólicos, etc.
  • Síntomas: hinchazón, sangrado, mal aliento.
  • Diagnóstico: El dentista normalmente sólo necesita hacer un diagnóstico visual; También es posible realizar exámenes con sonda y rayos X.
  • Curso de la enfermedad y pronóstico: La inflamación de las encías suele curarse en unos pocos días. Si no se trata, existe riesgo de periodontitis y pérdida de dientes.
  • Prevención: Higiene bucal, revisiones periódicas al dentista.

¿Qué es la gingivitis?

La inflamación de las encías (gingivitis) es una inflamación aguda o crónica de las encías que ocurre tanto en adultos como en niños (pequeños) sin afectar el tejido óseo. La inflamación de las encías se produce, por ejemplo, alrededor de un molar o la llamada muela del juicio.

¿Cómo se trata la gingivitis?

El remedio más importante para la gingivitis es la higiene bucal diaria. En particular, la placa bacteriana debe eliminarse periódicamente. Si la gingivitis dura mucho tiempo, es recomendable acudir al dentista para recibir tratamiento. El dentista primero limpiará todas las superficies de los dientes y eliminará la placa rebelde que es inaccesible para el paciente.

Si las encías están muy inflamadas (gingivitis grave) o se han formado bolsas en las encías, el médico decidirá caso por caso el tratamiento adecuado para la gingivitis y prescribirá la medicación adecuada.

Por lo general, basta con cepillarse bien los dientes dos veces al día. Esto puede prevenir o curar la inflamación de las encías. Es importante que limpies bien todas las superficies de los dientes y elimines la placa. Para ello, utilice un cepillo de dientes con cerdas más suaves. Esto reduce el riesgo de lesionar o irritar aún más las encías inflamadas al cepillarse los dientes.

Los expertos recomiendan utilizar hilo dental o cepillos interdentales para limpiar los espacios entre los dientes. Por último, puedes hacer gárgaras con un enjuague bucal antibacteriano o aplicar una pomada especial contra la inflamación de las encías. Ambos frenan el crecimiento de bacterias. También ayudan las recetas recetadas por el dentista a base de peróxido de hidrógeno.

¿Qué remedios caseros ayudan con la gingivitis?

Algunas personas utilizan remedios caseros para la gingivitis para aliviar los síntomas y ayudar a que la inflamación desaparezca más rápidamente. Por ejemplo, algunos pacientes hacen gárgaras con té de manzanilla. Se dice que la planta tiene un efecto antiinflamatorio y protector de las mucosas.

El aceite de árbol de té, un remedio casero, también se puede utilizar como enjuague para ayudar a tratar la inflamación de la boca. Entre otras cosas, se dice que tiene efectos antibacterianos y antiinflamatorios.

Vinagre de sidra de manzana como remedio casero: También se dice que el vinagre de sidra de manzana es un buen remedio casero para la inflamación de las encías. Se recomienda hacer gárgaras con una mezcla de dos cucharadas de vinagre de manzana y un vaso de agua al menos media hora antes de cepillarse los dientes todos los días. Se dice que estimula la producción de saliva y tiene un efecto antiinflamatorio y antibacteriano.

Los remedios caseros tienen sus límites. Si los síntomas persisten durante un período de tiempo más largo y no mejoran o incluso empeoran, siempre se debe consultar a un médico.

Homeopatía

Algunas personas propensas a sufrir gingivitis recurrente utilizan la homeopatía para ayudar a curar la inflamación de las encías. Se utilizan, por ejemplo, Silicea, Argentum nitricum o Atropa belladonna.

El concepto de homeopatía y su eficacia específica son controvertidos en la comunidad científica y no han sido demostrados claramente mediante estudios.

¿Cuáles son las posibles causas de la gingivitis?

Si no se limpia bien los dientes con regularidad, se puede desarrollar rápidamente una inflamación de las encías. Sin embargo, una lesión en las encías también puede provocar inflamación.

Sin embargo, si los restos de comida no se eliminan regularmente de los dientes, esto es literalmente un festín para las bacterias: se multiplican rápidamente. Junto con los residuos de alimentos, los productos metabólicos y la saliva, los gérmenes forman una biopelícula blanda en los dientes, la llamada placa bacteriana. En esta placa, las bacterias están en gran medida protegidas de las tropas de defensa del sistema inmunológico.

Pero eso no es todo: las bacterias producen ácidos y toxinas agresivas al metabolizar los residuos de alimentos. Estos penetran en las finas grietas entre el diente y la encía y atacan las encías. El sistema inmunológico reacciona con una reacción inflamatoria: se ha desarrollado una inflamación de las encías.

El sarro tiene una superficie rugosa a la que se adhiere fácilmente la placa. Como la placa favorece la inflamación de las encías, se intenta inhibir la formación de sarro mediante el uso de aditivos en las pastas dentales.

Si la placa no se elimina con regularidad, se deposita calcio y otros minerales en ella. La placa se vuelve más firme y se convierte en sarro. Las bacterias se asientan aún más fácilmente en su estructura rugosa. Además, se pueden formar pequeñas bolsas de pus en las encías (periodontitis) como resultado de la inflamación de las encías.

Diversos factores de riesgo hacen que las personas sean especialmente susceptibles a la gingivitis, como los trastornos metabólicos, la diabetes mellitus, el consumo de alcohol y nicotina, el estrés, los cambios hormonales (pubertad, embarazo, etc.) o la deficiencia de vitamina C.

Ciertos medicamentos para las convulsiones (preparados de hidantoína) y la presión arterial alta (preparados de nifedipina) también favorecen la gingivitis. Lo mismo se aplica al ingrediente activo ciclosporina A. Inhibe el sistema inmunológico y, por lo tanto, se utiliza después de trasplantes de órganos (para prevenir reacciones de rechazo) y enfermedades autoinmunes.

¿Cómo se ve la gingivitis?

Los dentistas distinguen entre gingivitis aguda y crónica. El primero suele ocurrir repentinamente y en la línea de las encías. Normalmente no duele.

Si la inflamación de las encías no desaparece durante un período de tiempo más largo (aproximadamente una semana), los médicos la consideran crónica. Si se extiende al periodonto y provoca periodontitis, en casos graves los dientes de la persona afectada pueden incluso caerse.

  • Enrojecimiento e hinchazón
  • Sangrado de las encías
  • Encías blandas
  • El mal aliento

Si la inflamación de las encías es causada por hongos (Candida albicans), aparece una capa blanca que se puede limpiar en las encías. Si la inflamación de las encías es causada por una infección por el virus del herpes, aparecen pequeñas ampollas en las encías, que son muy dolorosas, y se hinchan los ganglios linfáticos, entre otras cosas.

La gingivitis ulcerosa necrosante aguda (ANUG) es una forma especial de gingivitis. De esta forma, las bacterias atacan las encías entre los dientes y provocan inflamación de las encías. Se forman úlceras y las encías mueren. Las señales de alarma de este tipo de gingivitis son fiebre intensa y repentina, dolor, mal aliento y fatiga. En el caso de la gingivitis necrotizante, el dentista puede utilizar antibióticos como metronidazol o amoxicilina.

Examen y diagnóstico.

Normalmente, el dentista puede reconocer la inflamación de las encías a simple vista. Utilizan una sonda para comprobar el estado de las encías y comprobar si se han formado bolsas en las encías. A las bacterias les gusta especialmente instalarse en ellos.

Si la inflamación de las encías ha estado presente durante algún tiempo, suele ser útil un examen radiológico adicional de la mandíbula. Este procedimiento ayuda en la búsqueda de la causa y posibles consecuencias. Al examinar la saliva, el médico también tiene la oportunidad de determinar los tipos de bacterias que se encuentran en la cavidad bucal.

¿Cuánto dura la gingivitis?

El pronóstico de la inflamación de las encías es generalmente bueno. Con un cuidado dental y una higiene bucal cuidadosos, suele curarse al cabo de unos días.

Sin embargo, si no se trata, la gingivitis puede volverse crónica. A veces incluso se convierte en periodontitis, que es una inflamación de todo el periodonto. Con el tiempo, las encías retroceden, los dientes se aflojan y pueden caerse.

Prevención

Para evitar que se produzca inflamación de las encías, es importante mantener una higiene bucal exhaustiva y visitar al dentista para controles periódicos. De esta forma, la gingivitis se puede prevenir o detectar y tratar en una fase temprana.

Como medida preventiva, también es recomendable que un dentista le limpie los dientes profesionalmente al menos una vez al año. Esto se debe a que también llega a lugares de la boca a los que no se puede llegar con el cepillo de dientes.