Estructura de capilares | Capilar

Estructura de capilares

La estructura de un capilar se parece a un tubo. El diámetro de un capilar es de cinco a diez micrómetros. Desde el rojo sangre células (eritrocitos) que fluyen a través de los capilares tienen un diámetro de aproximadamente siete micrómetros, deben deformarse un poco cuando fluyen a través de la sangre pequeña vasos.

Esto minimiza la distancia sobre la cual el intercambio de sustancias entre sangre se producen células y tejidos. Dado que un intercambio constante de sustancias entre sangre y el tejido tiene lugar a través de la pared de los capilares, la pared debe ser lo más delgada posible (0.5 micrómetros). El espesor de la pared de mayor vasos, como las arterias o las venas, a través de las cuales no debe tener lugar ningún intercambio de sustancias, es mucho mayor.

Las arterias y las venas constan de tres capas de pared. La pared de los capilares, por otro lado, consta de una sola capa. Esta capa está formada por las llamadas células endoteliales.

Además, la denominada membrana basal refuerza la pared desde el exterior. La membrana basal se encuentra en todas partes del cuerpo donde las células epiteliales están separadas de la tejido conectivo. Además, los llamados pericitos participan en la construcción del capilar pared.

Se trata de células ramificadas cuya función aún está en disputa. Existen tres tipos diferentes de capilares, el continuo, el fenestrado y el discontinuo. Dependiendo de la tarea de los capilares individuales, su estructura puede variar. Los capilares continuos se encuentran principalmente en el corazón, pulmones, piel, cerebro y músculos

Como sugiere su nombre, consisten en una capa continua de células endoteliales. Estos se unen sin espacios y se colocan completamente sobre la membrana basal. Esta capa cerrada permite que solo se intercambien moléculas y gases muy pequeños a través de la pared.

Los capilares fenestrados tienen pequeños espacios entre las células endoteliales, que tienen un tamaño de aproximadamente 60 a 80 nanómetros, y se encuentran solo en una membrana basal delgada. Este tipo de capilares se encuentra en el tracto gastrointestinal, en los riñones y en las glándulas productoras de hormonas. A través de los poros presentes, se pueden intercambiar moléculas más grandes entre los vaso sanguíneo y el tejido.

El tercer tipo de capilares se caracteriza por huecos (hasta 100 nanómetros) en la pared, que afectan no solo a la capa endotelial sino también a la membrana basal. Estos capilares discontinuos también se denominan "sinusoides". Sustancias mucho más grandes, como proteínas o componentes sanguíneos, pueden pasar a través de estos poros al tejido. Se encuentran en el hígado, bazo, médula ósea y linfa nodos