Citostáticos

Introducción

Los citostáticos son medicamentos que inhiben el crecimiento y la proliferación de células en el cuerpo. Estas sustancias se pueden producir tanto de forma natural como sintética.

Campo de aplicación

Los fármacos citostáticos se utilizan principalmente en el campo de quimioterapia para células cancerosas. En este contexto, están destinados a evitar que las células tumorales "degeneradas" se multipliquen y se propaguen más. Sin embargo, los fármacos citostáticos también se utilizan en algunas enfermedades autoinmunes.

Aquí, por ejemplo, metotrexato se utiliza contra diversas formas de artritis. Los fármacos citostáticos se administran por vía intravenosa, es decir, a través de una infusión en el organismo, y por tanto ejercen su efecto en todo el organismo. Algunos medicamentos citostáticos también se pueden tomar en forma de tabletas.

Modo de acción

La ingesta de fármacos citostáticos inhibe el crecimiento y la proliferación celular. Esto tiene un efecto particular sobre las células de crecimiento rápido. Ya que células cancerosas las células crecen muy rápido y se dividen rápidamente, los fármacos citostáticos actúan selectivamente sobre estas células.

Pero las células de la piel y las membranas mucosas también se multiplican muy rápidamente, por lo que a menudo se producen daños como efectos secundarios. Los fármacos citostáticos se asignan a diferentes grupos que difieren en su modo de acción. El fármaco citostático altera el material genético (el ADN) de la célula tumoral de modo que no pueda producirse la división celular correcta o el metabolismo de la célula se ve afectado de tal manera que muere.

Posteriormente, el cuerpo descompone las células defectuosas o muertas y se detiene el crecimiento del tumor. En el mejor de los casos, el tamaño del tumor incluso disminuye y el tumor desaparece. Se puede ver si la terapia con el fármaco citostático es efectiva después de unos días, a veces incluso después de algunas semanas.

La terapia con un fármaco citostático se considera exitosa cuando el tumor desaparece, se encoge o al menos deja de crecer. En muchos casos, diferentes fármacos citostáticos se combinan entre sí durante quimioterapia. Las diferentes sustancias atacan en diferentes sitios de proliferación celular y crecimiento celular, por lo que las sustancias individuales a menudo se pueden usar en dosis más bajas. Esto tiene la ventaja de que los efectos secundarios suelen ser menos graves.