Conducto lagrimal bloqueado: ¿qué se puede hacer al respecto?

Breve descripción

  • Tratamiento: El médico trata primero de forma conservadora (sin cirugía), por ejemplo mediante masaje del saco lagrimal, gotas antibióticas para los ojos o enjuagues oculares. Si no hay mejoría, generalmente es necesaria la cirugía.
  • Causas: La obstrucción del conducto lagrimal es adquirida (p. ej., debido a una infección o lesión) o congénita (p. ej., debido a una malformación).
  • Descripción: Conducto lagrimal bloqueado o estrechado por el cual el líquido lagrimal ya no fluye libremente.
  • Diagnóstico: conversación con el médico, examen del ojo, ecografía si es necesario, radiografía.
  • Curso: Generalmente bien tratable. En casos graves, se producen abscesos del saco lagrimal e inflamación del tejido circundante.

¿Qué se puede hacer ante un conducto lagrimal bloqueado?

Tratamiento no quirúrgico

Inicialmente, el médico intenta tratar un conducto lagrimal bloqueado sin intervención quirúrgica (de forma conservadora). Al hacerlo, procede con el mayor cuidado posible para evitar mayores lesiones en el ojo. Especialmente en los bebés, es importante que el tratamiento sea lo más suave posible. Esto se debe a que incluso las lesiones más pequeñas pueden provocar cicatrices en la zona del conducto nasolagrimal.

Con bebés, primero espera y verás

Si la membrana no se vuelve a formar, el conducto nasolagrimal permanece cerrado o muy estrechado. Como resultado, las lágrimas no pueden drenar por la nariz, retroceden y finalmente corren por el borde del párpado.

Masaje del saco lagrimal

En algunos casos, un masaje del saco lagrimal también ayuda a abrir el conducto lagrimal. Para ello, se masajea la zona del saco lagrimal con movimientos de caricias desde la esquina interna del párpado hasta la nariz con las yemas de los dedos. Al aplicar una suave presión sobre el saco lagrimal, se intenta "reventar" la oclusión membranosa con la ayuda del líquido estancado.

¡Haz que un oftalmólogo o pediatra te enseñe previamente la técnica del masaje!

Remedio casero

No se recomiendan los remedios caseros por sí solos para tratar un conducto lagrimal bloqueado. ¡Haga que un médico le aclare los síntomas de antemano!

El calor de la compresa favorece la circulación sanguínea y, si es necesario, ayuda a ensanchar un poco el conducto lagrimal. Para las compresas para los ojos también son adecuadas las infusiones calientes o frías de caléndula, té negro o corteza de roble. Pregúntele a su médico o farmacéutico sobre esto.

Un lavado de ojos (ducha ocular) de farmacia también puede aliviar los ojos irritados (p. ej. por cuerpos extraños como piedras pequeñas). Suele contener una solución salina estéril que corresponde al contenido natural de sal de los ojos.

No utilice agua del grifo para enjuagarse los ojos. Esto aumenta aún más el riesgo de infección.

En algunos casos, también ayuda enjuagar la nariz con una solución salina. El conducto lagrimal termina en la nariz, por lo que es posible que la causa de la obstrucción también esté allí. Esto se puede eliminar mediante una irrigación nasal si es necesario.

Utilice remedios caseros sólo después de consultar a su oftalmólogo y lávese bien las manos antes de cada uso.

En el caso de infecciones agudas y signos de inflamación bacteriana (p. ej., pus en las comisuras de los ojos), el médico suele recetar colirios antibióticos. Inhiben la formación de bacterias y, por tanto, la inflamación. La persona afectada (o en el caso de los bebés, los padres) se aplica el colirio en los ojos varias veces al día durante varios días. Su oftalmólogo le indicará qué dosis es necesaria en su caso individual.

Irrigación de las vías lagrimales

Si el conducto lagrimal no se abre por sí solo o masajeando el saco lagrimal, el médico enjuaga los conductos lagrimales que drenan con solución salina. Para ello utiliza una cánula especial (una aguja fina y hueca) que introduce con cuidado en el conducto lagrimal bloqueado.

La cirugía

En casos graves (por ejemplo, lesiones) o cuando un tratamiento no farmacológico no produce el éxito deseado, el médico realiza una cirugía en el ojo.

Sondeo de los conductos lagrimales

En ocasiones, es necesario que introduzca un pequeño globo inflable en el conducto lagrimal para ensancharlo aún más (dilatación con balón). En algunos casos, el médico inserta un fino tubo de plástico o hilo durante tres o cuatro meses para permitir que las lágrimas vuelvan a drenar.

Dacriocistorrinostomía (DCR)

El médico lo deja allí durante unos tres a seis meses para evitar que el conducto lagrimal vuelva a cerrarse. El procedimiento también se realiza bajo anestesia general.

Cirugía del conducto lagrimal endonasal

En los adultos, la cirugía suele ser la única forma de eliminar con éxito y de forma permanente las obstrucciones de larga data en el conducto lagrimal. En los bebés sólo es necesario en casos excepcionales.

¿Cómo se desarrolla un conducto lagrimal bloqueado?

Un conducto lagrimal bloqueado tiene varias causas posibles. Éstas incluyen:

Conducto nasolagrimal no completamente desarrollado.

Entre el cinco y el siete por ciento de todos los recién nacidos, la membrana del conducto lagrimal no se abre por sí sola después del nacimiento y el conducto nasolagrimal permanece cerrado o muy estrechado. Como resultado, las lágrimas no pueden drenar por la nariz, retroceden y eventualmente corren por el borde del párpado (estenosis congénita o connatal del conducto lagrimal).

Los huesos faciales o craneales malformados también pueden provocar la obstrucción de los conductos lagrimales.

Inflamación de los conductos lagrimales.

Lesiones de los conductos lagrimales

Si los conductos lagrimales o las áreas óseas circundantes se lesionan (p. ej., por un golpe en la cara o un accidente), el conducto lagrimal también puede estar obstruido.

Conductos lagrimales estrechados en la vejez.

Durante el proceso de envejecimiento, en algunas personas los conductos lagrimales se estrechan. Esto aumenta el riesgo de que los conductos lagrimales se bloqueen.

Tumores, quistes, cálculos.

¿Qué se entiende por conducto lagrimal bloqueado?

La glándula lagrimal secreta regularmente líquido lagrimal para humedecer uniformemente el ojo al parpadear. En la esquina interna del ojo, el exceso de líquido lagrimal drena hacia la nariz a través de los conductos lagrimales, que consisten en puntos lagrimales, túbulos lagrimales y el conducto nasolagrimal.

Como resultado, el líquido lagrimal ya no puede drenar adecuadamente, lo que hace que el líquido lagrimal corra por el borde del párpado (epífora): las lágrimas del ojo.

Mientras que la estenosis del conducto lagrimal en adultos suele ser causada por una inflamación o lesión de los conductos lagrimales, en los niños es predominantemente el resultado de un conducto nasolagrimal no completamente desarrollado. Del cinco al siete por ciento de todos los recién nacidos se ven afectados por una estenosis congénita del conducto lagrimal.

Un conducto lagrimal bloqueado provoca diversos síntomas tanto en bebés como en adultos. Las personas afectadas muestran síntomas que incluyen los siguientes:

  • El ojo llora constantemente (p. ej., incluso cuando el niño no llora).
  • Las lágrimas corren por el borde del párpado o por la mejilla.
  • La visión de la persona afectada está borrosa.
  • Los ojos pican y están muy rojos (los síntomas son similares a los del ojo seco).
  • La piel del rostro se irrita y enrojece por las lágrimas.
  • Si el conducto lagrimal permanece bloqueado durante mucho tiempo, el saco lagrimal suele inflamarse (dacriocistitis). El moco sale de los puntos de lágrima cuando se aplica presión en el área del saco lagrimal (tapón de moco).
  • Las lágrimas parecen más viscosas (el líquido lagrimal en el saco lagrimal se espesa).
  • La persona afectada presenta hinchazón y dolor en la zona del ángulo interno del ojo.

En los bebés, los primeros síntomas suelen aparecer en las primeras semanas después del nacimiento.

¿Qué hace el médico?

Si los síntomas persisten (por ejemplo, ojos llorosos, dolor en los ojos), es necesario consultar a un médico. El primer punto de contacto es su médico de cabecera. Si es necesario, lo derivará a un oftalmólogo u otorrinolaringólogo para exámenes adicionales.

Anamnesia

En primer lugar, el médico realiza una entrevista detallada con el paciente (anamnesis). Entre otras cosas, hace preguntas sobre los síntomas existentes, por ejemplo:

  • ¿Cuándo ocurrieron los síntomas?
  • ¿Surgieron repentinamente o se desarrollaron durante un período de tiempo más largo?
  • ¿Se conocen los posibles desencadenantes de las dolencias (por ejemplo, una lesión)?

Examen del ojo

Para comprobar si el conducto lagrimal está bloqueado, gotea un líquido coloreado en el ojo. Si el médico observa que el líquido lagrimal coloreado no drena como de costumbre en el ángulo interno del ojo, o si la persona afectada incluso prueba el líquido y siente que corre por la parte posterior de la garganta, esto le proporciona las primeras indicaciones de un conducto lagrimal bloqueado.

Si hay inflamación, con frecuencia también sale pus del saco lagrimal cuando se aplica presión en el rabillo del ojo.

Para una mayor aclaración son adecuados los exámenes de ultrasonido y rayos X. En una radiografía, el médico visualiza, entre otras cosas, las condiciones de drenaje en el conducto nasolagrimal. Para ello, previamente enjuaga el conducto lagrimal con medio de contraste.

¿Se puede tratar fácilmente un conducto lagrimal bloqueado?